El test que confirma que tu móvil te espía: soy experto en ciberseguridad y ésta es la prueba definitiva


Vivimos en una era en la que la tecnología nos facilita muchas tareas cotidianas, desde comunicarnos con nuestra familia y amigos hasta acceder a información de cualquier parte del mundo en cuestión segundos. Sin embargo, este acceso permanente a nuestros dispositivos también tiene un «lado oscuro» del que muchas veces no somos conscientes. ¿Alguna vez has hablado sobre un tema que nunca antes te había interesado, y poco después empiezas a recibir publicidad relacionada? No eres el único que tiene la sensación de que su móvil le espía.
Aunque suena a teoría conspirativa, algunos estudios sugieren que hay algo de cierto detrás de esta sospecha. La realidad es que muchas aplicaciones tienen permisos para acceder al micrófono del teléfono, incluso cuando no las estás utilizando. Y aunque las empresas aseguran que no graban ni escuchan nuestras conversaciones sin consentimiento, lo cierto es que damos acceso a estos servicios mediante largos textos legales que casi nunca leemos.
¿Quieres saber si tu móvil te espía?
Si quieres salir de dudas y comprobar si tu teléfono podría estar «escuchándote», hay una prueba muy sencilla que puedes hacer tú mismo en casa. Fue diseñada y compartida por expertos en ciberseguridad de NordVPN, y puede darte una pista bastante clara sobre si tu dispositivo está llevando a cabo este tipo de vigilancia pasiva.
La clave del experimento es elegir un tema que jamás hayas buscado ni mencionado en tus dispositivos digitales. Puede ser un lugar del mundo que nunca te haya interesado visitar, un producto exótico del que nunca hayas oído hablar o una afición que no tiene absolutamente nada que ver contigo. Supongamos, por ejemplo, que eliges hablar sobre viajes a Mongolia, un país que nunca ha estado en tu radar turístico.
Una vez hayas elegido el tema, comienza a hablar sobre él en voz alta cuando estés cerca de tu teléfono móvil. Puedes hacerlo a solas, fingiendo una conversación con alguien más, o involucrar a un amigo o familiar para que el diálogo sea más natural. Lo importante es repetir esta conversación unos minutos cada día durante tres o cuatro días consecutivos. Habla con entusiasmo, como si realmente te interesara ese país, y menciona que te gustaría buscar vuelos, visitar monumentos o incluso aprender el idioma.
Durante este experimento, es crucial que no busques nada relacionado con el tema en cuestión. No hagas búsquedas en Google, no consultes redes sociales, ni compartas el tema por WhatsApp. Toda la interacción con ese asunto debe ser únicamente por voz y con el smartphone a lado.
Después de unos días siguiendo esta rutina, empieza a utilizar tu móvil con normalidad para comprobar si te espía. Navega por tus redes sociales habituales como Instagram, TikTok, Facebook o X (antes Twitter), consulta tus webs de noticias favoritas o simplemente busca otros temas que sí te interesan. Si el experimento surte efecto, empezarás a notar que te aparece publicidad relacionada con Mongolia, ese destino del que únicamente hablaste en voz alta, sin haberlo buscado nunca.
Si, efectivamente, el dispositivo muestra anuncios relacionados con algo que nunca buscaste ni escribiste, sólo hay una explicación lógica para ello: escuchó tus conversaciones. Y aunque esto puede sonar ilegal, en realidad muchas aplicaciones están cubiertas por las condiciones de uso que tú mismo aceptaste al instalarlas.
Los asistentes virtuales como Siri, Google Assistant o Alexa están diseñados para escuchar ciertas palabras clave, como «Hey Siri» o «OK Google». En teoría, no deben grabar nada que no sea una orden directa, pero si han recibido permisos para acceder al micrófono, podrían estar registrando algo más de lo que creemos.
¿Qué puedes hacer?
Si compruebas que tu móvil te espía, hay varias medidas que puedes tomar para reducir esta invasión de privacidad. En primer lugar, desactiva los asistentes virtuales si no los usas con frecuencia. Esto se puede hacer desde el menú de configuración de tu dispositivo, y evitarás que estén activos todo el tiempo.
También es recomendable revisar los permisos que has concedido a las aplicaciones. En dispositivos Android e iOS puedes ver qué apps tienen acceso al micrófono, y revocar esos permisos en las que no sea estrictamente necesario. Muchas aplicaciones piden permisos que no tienen relación directa con su funcionalidad principal, por lo que es importante ser exigente con esto.
Además, algunas aplicaciones almacenan el historial de tus interacciones por voz. Puedes borrar estas grabaciones desde las configuraciones de privacidad, tanto en los asistentes virtuales como en tu cuenta de Google o Apple.
Por último, aunque no menos importante, procura ser más consciente del uso que haces de tu móvil. No se trata de vivir con paranoia, pero sí de tener en cuenta que cada vez que llevamos el teléfono con nosotros, puede estar recabando datos que ni siquiera imaginamos. Desde nuestra ubicación hasta nuestras preferencias de consumo, pasando por nuestras voces, estos datos valen mucho para las grandes empresas de publicidad.