SALUD

El mito que la ciencia destruye: dormirse en menos de 5 minutos no es un don, es una deuda crónica que ‘le roba la vida’

No es un talento, es un síntoma: la verdad detrás de dormir en menos de 5 minutos

Deuda de sueño crónica: despierta ante la señal de alarma que es la somnolencia extrema

Estas personas tienen que dejar ya de beber cerveza para siempre: lo piden los expertos

Se lo recetó su médico y se convirtió en adicta al fentanilo: "Te vuelves gris"

neurólogo desmiente mito sueño
Hombre durmiendo.

Para muchas personas, la capacidad de quedarse dormido en el momento en que la cabeza toca la almohada es motivo de orgullo. Sin embargo, el reconocido neurólogo Conrado Estol desmiente este mito con una advertencia seria: la rapidez extrema para conciliar el sueño no es un superpoder, sino una señal de alarma que exige atención médica. El experto ha confirmado que este fenómeno es, en realidad, una manifestación de una deuda de sueño crónica y potencialmente peligrosa.

El déficit de sueño que tu cuerpo ya no puede ocultar

Según el doctor Estol, la creencia popular de que el «dormilón» es una persona bien descansada está completamente equivocada. Si usted es capaz de entrar en el sueño profundo en un lapso inferior a cinco minutos, su cuerpo está sufriendo una carencia de descanso tan severa que ha perdido la capacidad de regular su adormecimiento.

El tiempo que un adulto sano debería tardar en pasar de la vigilia al sueño es de entre 10 y 15 minutos. Este periodo, conocido como latencia del sueño, indica un equilibrio adecuado entre el cansancio acumulado y el reposo reciente. Reducir este tiempo por debajo del umbral de los diez minutos, especialmente de forma constante, se interpreta como un déficit crónico de sueño.

Las graves consecuencias de la falta de descanso

El verdadero problema, advierte el neurólogo, radica en las consecuencias sistémicas de vivir con una falta de sueño acumulada. El sueño no es un lujo, sino un proceso biológico esencial para la reparación física y, sobre todo, cognitiva.

La privación constante del descanso nocturno adecuado afecta directamente a funciones vitales:

  • Riesgo cognitivo: el déficit de sueño ha sido vinculado a un aumento del riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas a largo plazo, incluyendo la demencia.
  • Salud metabólica: altera la regulación de las hormonas del apetito (grelina y leptina), lo que dificulta el control del peso.
  • Inmunidad: compromete la respuesta del sistema inmunitario, haciéndonos más vulnerables a enfermedades.
  • Longevidad: la calidad del sueño es un factor determinante en la esperanza de vida.

¿Cuándo es el momento de buscar ayuda médica?

El mensaje del Dr. Estol a la población es tajante: si la necesidad de dormir de forma inmediata se ha convertido en su norma, es imprescindible que acuda a un especialista.

No se trata de una simple recomendación, sino de una necesidad clínica. La incapacidad de mantener una latencia de sueño saludable debe ser evaluada por neurólogos o expertos en sueño. Ellos pueden determinar la causa subyacente de la somnolencia excesiva e indicar tratamientos específicos, ya que dormir en exceso no compensa el daño de la falta de descanso sostenida.

Dejar de considerarlo un motivo de orgullo y empezar a verlo como un síntoma es el primer paso para proteger su salud cerebral y su calidad de vida.

Lo último en Curiosidades

Últimas noticias