5 curiosidades sobre el accidente de Chernobyl que te sorprenderán
El accidente de Chernobyl ha sido uno de los más impactantes que ha sufrido Europa en el último siglo. Tuvo lugar el 26 de abril de 1986, cuando Ucrania formaba parte de la Unión Soviética. El accidente nuclear dejó una ciudad fantasma, convirtiéndose en un punto negro en el mapa de Europa. Para que entiendas mejor qué supuso este momento en la historia, aquí tienes las curiosidades de Chernobyl más interesantes.
Es un accidente nuclear de nivel 7
La Escala Internacional de Accidentes Nucleares sirve para medir y facilitar el nivel de gravedad de un accidente nuclear. INES, de sus siglas en inglés, está dividida en siete niveles. Tan solo hay dos que lo hayan alcanzado: Chernobyl y Fukushima.
Más de 25.000 muertos
Nunca se han dado cifras oficiales por parte de Ucrania, pero se estima que la radiación liberada afectó a más de 100.000 personas. De ellas, una gran parte murió por causa de la radiación. Pero también hubo gente se suicidó por la catástrofe vivida. Los niveles de radiación eran tan altos que hubo cadáveres que fueron enterrados en ataúdes de plomo.
La explosión no fue el final
Todos podemos pensar que la explosión supondría el final de la central nuclear, pero no. La Unión Soviética siguió utilizándola hasta que en 1993 Ucrania, ya independiente, decidió cerrarla. A pesar de ello siguió aportando energía, pues suponía un 5 por ciento de la que utilizaba el país. Para poder utilizarla se trató de limpiar. Los operarios solo podían trabajar en turnos de 40 segundos seguidos.
La vida salvaje ha vuelto
Aunque todavía van a tener que pasar miles de años hasta que pueda estar habitado por humanos, ya hay vida en Chernobyl. Los animales salvajes han encontrado en esta zona un lugar libre del hombre. Lobos, zorros y otras especies han ocupado la zona aislada de la central. Pero todavía hay personas que siguen viviendo en áreas cercanas que volvieron tras la explosión.
Suecia dio la voz de alarma
El país nórdico cubre la mayoría de su necesidad eléctrica por tres centrales nucleares. La de Forsmark es la segunda más grande, y fue la primera en conocer lo que ocurrió en Ucrania. La URSS no comunicó nada, y fue en la central sueca donde se detectaron niveles elevados de radiación. Ubicada a 1.100 kilómetros, este hecho obligó a la Unión Soviética de informar sobre lo ocurrido.