El 25% de los que pagarán la tasa turística que prepara la izquierda serán los propios valencianos
El 25% de los que pagarán la tasa turística que prepara la Izquierda en la Comunidad Valenciana serán los propios valencianos, que podrían verse obligados a abonar el impuesto en caso de pernoctar fuera de su casa y de su municipio, según datos del sector.
Las ‘ocurrencias’ de los partidos que componen el Gobierno de la Generalitat Valenciana (Compromís, Podemos y PSOE) continúan siendo motivo de subida de impuestos a los propios valencianos. El último caso es el de la tasa turística. Un nuevo gravamen que Compromis y Podemos acordaron el mismo día en que el presidente de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, se encontraba reunido en Sevilla con el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno.
Ese día, Mónica Oltra y Héctor Illueca ‘resucitaron’ un viejo objetivo de ambas formaciones: imponer una tasa turística, que denominaron ‘a la valenciana’ y que pretenden incluir en los presupuestos de 2022. Según los cálculos de Oltra e Illueca, el beneficio para las arcas públicas sería en torno a los 45-49 millones de euros anuales, que irían destinados -dijeron- a políticas de emancipación de jóvenes. La tasa turística gravaría las pernoctaciones en la Comunidad Valenciana.
Los socialistas, que hasta ahora venían oponiéndose a la medida, dejaron una puerta abierta, pero con la boca pequeña, porque apenas unos días después del anuncio de Compromís y Podemos, dijeron que esa tasa les parecería bien en el caso de que fueran algunos ayuntamientos los que optaran por su implantación para resolver problemas derivados de la propia actividad y que debían ser esos ayuntamientos los que decidiesen en qué invertir los beneficios de esa tasa. Por tanto, no con carácter general. Pero puerta entreabierta y a ver qué decía la calle. Pues mientras explicaban esa posible excepcionalidad, Ximo Puig afirmaba que ahora, la prioridad era otra: la salida del Covid.
Los hoteleros, encabezados por su Patronal Hosbec, sí se pusieron frontalmente en contra: No, nunca y bajo ninguna excepción es, en síntesis, lo que defienden. Porque ni una ni otra opción contenta al sector, muy dañado por la crisis del Covid. En el caso de Benidorm, por situar la referencia de una ciudad que en sí misma es turismo. El paro llegó a acrecentarse en más de 3.000 personas en un solo mes, pasando de poco más de 5.000 a más de 8.000 parados.
Los propios empresarios turísticos, según subrayan desde Hosbec, que desde el anuncio de Compromís y Podemos se posicionó en contra de esa tasa, han tenido que responder a las pérdidas multimillonarias que ha sufrido el Turismo (más de 4.500 millones), en algunos casos a costa de su propio patrimonio personal para sacar adelante la actividad y puestos de trabajo.
Pero, es más, el sector entiende que, según sus datos, un 25% de los afectados por la tasa, personas que deben pagar el incremento del gasto que supone la pernoctación, serían los propios habitantes de la Comunidad Valenciana. Acudir a una boda de un lado de la Comunidad Valenciana a otro, viajar para cerrar un negocio o, simplemente, para disfrutar de unos días de asueto con la familia de Alcoy a Valencia, por ejemplo, incluiría el pago de esa tasa siempre que hubiera pernoctación. Es decir, que supusiera dormir una noche en un hotel.
De momento, los partidos del Botánico que están en el Gobierno autonómico (PSOE, Compromís y Podemos) tienen a una comisión de varios miembros trabajando en los presupuestos autonómicos y la Oposición tiene marcados en rojo los últimos días de octubre como fecha de presentación. Será entonces cuando las cartas se pongan sobre la mesa, pero la intención de imponer una tasa turística ‘a la valenciana’ ya ha quedado patente.