¿Pueden oler los pájaros? La ciencia responde

La ciencia responde sobre una de las preguntas que quizás tenemos en mente, sobre la capacidad de los pájaros para poder oler tiene una respuesta. Ha llegado el momento de empezar a pensar en unos animales que están muy presentes en nuestro día a día. Los pájaros son seres que conviven con los seres humanos. Hay pájaros que realmente acaba siendo lo que marcará una diferencia importante, si tenemos en cuenta todo lo que conseguimos con ellos y lo que nos dice la ciencia sobre estos animales.

El hecho de poder oler es una cualidad muy humana que seguramente debemos empezar a tener en cuenta en ciertos animales. Los mamíferos pueden tener en común estos sentidos, pero también los pájaros que pueden acabar teniendo un olfato que puede acabar siendo lo que dictan los expertos. El hecho que puedan tener olfato es importante que sea una realidad o no, en esencia, puede ser la que realmente nos afecte de lleno, por lo que, al final, debemos empezar a visualizar este elemento en unos pájaros que pueden acabar sufriendo una evolución que puede cambiarlo todo. La ciencia ya tiene muy claro por qué los pájaros pueden oler

El olfato es un sentido esencial

El olfato da una información indispensable en muchos sentidos, por lo que, todos los seres que poseen este elemento tienen en común recibir una información del mundo indispensable. Todo elemento nuevo puede acabar siendo el que nos acompañe en estos días que tenemos por delante.

Habrá llegado el momento de empezar a gestionar algunos detalles que son claves para conocer la evolución de unos seres que nos han acompañado en estos días. Por lo que, al final, lo que acabamos teniendo es un sentido más que puede servir para poder saber un poco más sobre estos animales.

Los pájaros podrían ser de los pocos afortunados que poseen un olfato clave para su día a día. Se puede conseguir una importante transformación de la mano de un sentido que les aportará una serie de detalles que son claves y que seguramente acabará siendo lo que haya marcado su evolución.

Con los pájaros convivimos, ya sea en cautividad con algunas mascotas o conviviendo en ciudades o en medio de la naturaleza. La gran variedad de estos pájaros quizás acabe dando de sí una serie de elementos que van de la mano y que pueden acabar siendo las que haya ayudado en la evolución de estos animales.

La respuesta a si los pájaros pueden oler

Un estudio realizado por Irene Saavedra y Luisa Amo, investigadoras del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN) demuestra que los pájaros pueden oler, algo que hasta ahora no se había podido tener tan claro. Los estudios realizados por estas expertas no dejan lugar a dudas.

Publicado en la revista Journals nos explica cómo consiguieron demostrar que para poder llegar hasta sus presas estaban muy pendientes de su olfato. Por lo que según este estudio: «Las señales químicas juegan un papel fundamental en la atracción y elección de pareja. Las hembras de lepidópteros, como la polilla de invierno (Operophtera brumata), emiten feromonas para atraer a los machos en el período reproductivo. Sin embargo, estas señales químicas también podrían ser interceptadas por los depredadores. Hasta donde sabemos, ningún estudio ha examinado si las aves pueden detectar feromonas de sus presas. Los adultos de O. brumata son parte de la dieta invernal de algunas especies de herrerillos insectívoros, como el carbonero común (Parus major) y el herrerillo común (Cyanistes caeruleus). Realizamos un experimento de campo destinado a desentrañar si las aves insectívoras pueden explotar las feromonas emitidas por sus presas para la localización de presas. Colocamos larvas artificiales y un dispensador en ramas de robles melojos (Quercus pyrenaica). En la mitad de los árboles colocamos un dispensador de feromonas de O. brumata y en la otra mitad colocamos un dispensador de control. Medimos la tasa de depredación de las aves sobre larvas artificiales. Nuestros resultados muestran que más árboles tenían larvas con signos de depredación aviar cuando contenían una feromona de O. brumata que cuando contenían un dispensador de control. Además, la proporción de larvas artificiales con signos de depredación aviar fue mayor en los árboles que contenían la feromona que en los árboles de control. Nuestros resultados indican que las aves insectívoras pueden explotar las feromonas emitidas por las hembras de polilla para atraer a los machos, como un método de detección de presas. Estos resultados resaltan el uso potencial de las aves insectívoras en el control biológico de plagas de insectos».

El resultado de este estudio publicado hace unos años y los que han precidido a esta primera piedra que construye un elemento que puede cambiar para siempre la manera en la que vemos la evolución de estos pájaros. Parece difícil de creer, pero es una realidad que los pájaros también puedan oler.