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Colau deja a Barcelona sin belén: lo sustituye por un vídeo nocturno que cuesta 100.000 €

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La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau (En Comú Podem), ha dejado a la ciudad sin un belén permanente en la plaza que hay frente al Consistorio. En sus octavas navidades, la regidora de la Ciudad Condal sustituye el nacimiento por un vídeo que se proyecta en la fachada de su sede principal que cuesta 100.000 euros y en el que aparecen la figuras del niño Jesús, la Virgen María y San José escasos segundos en el montaje audiovisual.

Un trastero, una patera, unas tiras metálicas, unos palos… cada año el belén del Ayuntamiento de Barcelona es una ocurrencia de una dimensión mayor. En esta ocasión el nacimiento es transparente. Al menos mientras hay luz del día. Tal como ha podido saber OKDIARIO, el equipo de Gobierno de Colau ha firmado un contrato negociado sin publicidad, recabando sólo una oferta, de 49.463 euros para el «diseño y creación del pesebre de Navidad». A esto se suman otros 50.000 euros en los equipos técnicos necesarios para emitir el vídeo con proyectores.

El belén de la plaza de Sant Jaume de Barcelona sólo se puede ver cuando anochece y hasta las diez de la noche. La instalación, dicen desde el Consistorio, es «digital en formato vídeo mapping interactivo y representa diferentes tradiciones de Navidad». La empresa Onionlab ha elaborado el belén que, subrayan, permite la interacción de la ciudadanía a través de una aplicación web que se utiliza desde el móvil. Se puede ver el nacimiento unos segundos y rápidamente se muestran otros elementos navideños como la gastronomía típica catalana de estas fechas, el Tió (el tronco con barretina y una cara sonriente, que colocan las familias catalanas junto a la chimenea y que tras golpearlo aparecen regalos y dulces cada 24 de diciembre) y los Reyes Magos.

El teniente de alcalde de Cultura, Jordi Martí, publicitó esta acción audiovisual como un «juego donde toda la ciudadanía podrá participar». El vídeo presenta cuatro escenas de 10 minutos que se repiten en bucle en el horario previsto en las ventanas del edificio que se abrirán virtualmente para mostrar diferentes escenas de la Navidad.

Para el Consistorio, «los elementos tradicionales se combinan con la modernidad y la actualidad tecnológica, y destaca la posibilidad de que por primera vez se pueda modificar por los visitantes».

Frente a los 100.000 euros de Cola, el Ayuntamiento madrileño liderado por José Luis Martínez-Almeida ha gastado 31.960 euros en un belén tradicional en el Palacio de Cibeles. La Generalitat sí mantiene el tradicional nacimiento, en su caso, de 4.000 euros y la Comunidad de Madrid ha hecho lo propio en la Real Casa de Correos, con 45.000 euros adjudicados a la Asociación de Belenistas de Madrid, repitiendo el precio de la última Navidad.

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La pasada Navidad, Colau sorprendió a los barceloneses colocando unas tiras metálicas en la fachada simbolizando la Sagrada Familia. Sin embargo, la lluvia y el viento dieron al traste con la iniciativa. El año anterior, unas cajas apiladas, muebles y todo tipo de objetos representaban teóricamente lo que decía era ser un belén. «Durante más de trescientos días y trescientas noches, duermen en el desván o en los armarios, los cajones o los altillos. Y un buen día de diciembre, con mucho alboroto y expectación, los despertamos de repente y los llevamos a la sala de estar», relataban.

En 2018 el belén se limitaba a unas sillas vacías que representaban a la Virgen María, el Niño Jesús y San José. Todos alrededor de una mesa donde la comida del plato era una especie de pasto.

En 2017, las quejas de los ciudadanos llegaron a calificar el belén navideño del consistorio como «una mierda pinchada en un palo». Este belén navideño consistía en un conjunto de 25 figuras de metacrilato sostenidas en el aire que simulaban un pesebre, aunque muchos barceloneses no llegaron a entender el sentido de esta obra.

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