Cuidados del bebé

Conjuntivitis en bebés. Todo lo que necesitas saber

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Causas y cómo tratar la conjuntivitis en los bebes
Blanca Espada

Con toda seguridad, lo que más te va a preocupar respecto a tu hijo es que tenga una buena salud. Por eso es importante que estés convenientemente informada de todo tipo de enfermedades que puede sufrir. Y es que muchas son casi inevitables cuando empieza a acudir a la guardería o al colegio. Es el caso de la conjuntivitis en bebés de la que te explicamos a continuación, todo lo que necesitas saber.

¿Qué es la conjuntivitis?

Para comenzar lo primero que tienes que saber es que la conjuntivitis es una inflamación de la membrana transparente que se encarga de recubrir el interior de los párpados y también el blanco de los ojos. Es decir, es una inflamación de la conjuntiva, de ahí el nombre de la patología que nos ocupa.

Un virus, un alérgeno, un elemento irritante o una bacteria son los principales responsables que pueden ocasionar que el bebé tenga que hacerle frente a ese problema de salud que es muy contagioso.

Síntomas de la conjuntivitis en bebés

Los síntomas de la conjuntivitis pueden variar según la causa, pero en general incluyen:

  • Enrojecimiento e hinchazón de los ojos y los párpados.
  • Aumento de las lágrimas y sensibilidad a la luz.
  • Picor, ardor o sensación de arenilla en los ojos.
  • Secreción de color blanco, amarillo o verde que puede pegar los párpados o las pestañas.
  • Dificultad para abrir los ojos al despertar.

La conjuntivitis puede afectar a uno o ambos ojos y suele durar entre 5 y 10 días, dependiendo de la causa y el tratamiento.

Causas de la conjuntivitis en bebés

Las causas más frecuentes de la conjuntivitis en bebés son:

  • Bacterias: son microorganismos que pueden entrar en el ojo a través de las manos sucias, objetos contaminados o infecciones en otras partes del cuerpo, como el oído o la garganta. Las bacterias más comunes que causan conjuntivitis son los estafilococos y los estreptococos. La conjuntivitis bacteriana se caracteriza por una secreción espesa y abundante de color amarillo o verde que puede pegar los párpados. Se trata con antibióticos en forma de gotas o pomada ocular.
  • Virus: son agentes infecciosos que pueden transmitirse por el aire, por contacto directo o por secreciones respiratorias. Los virus más habituales que provocan conjuntivitis son los que causan resfriados o gripes. La conjuntivitis viral se manifiesta por una secreción más fluida y escasa de color amarillo que puede afectar a ambos ojos. No se trata con antibióticos, sino con medidas de higiene y alivio de los síntomas.
  • Alérgenos: son sustancias que pueden desencadenar una reacción alérgica en el ojo, como el polen, el polvo, los animales o algunos cosméticos. La conjuntivitis alérgica se presenta con picor intenso, lagrimeo y enrojecimiento de los ojos. Se trata con antihistamínicos orales o en gotas y con la evitación del alérgeno.

Tratamiento de la conjuntivitis en bebés

El tratamiento de la conjuntivitis en bebés depende de la causa que la origine. En general, se recomienda:

  • Limpiar los ojos con una gasa estéril humedecida en suero fisiológico o agua hervida, desde el lagrimal hacia fuera, usando una gasa diferente para cada ojo.
  • Aplicar las gotas o la pomada ocular recetadas por el médico según las indicaciones, separando suavemente los párpados y evitando tocar el ojo con el envase.
  • Evitar frotar los ojos o usar pañuelos, toallas u otros objetos que puedan irritarlos o contagiarlos.
  • Lavarse las manos con frecuencia y evitar compartir objetos personales con otras personas.
  • Consultar al médico si los síntomas no mejoran en unos días, si hay dolor intenso, visión borrosa o fiebre.

Prevención de la conjuntivitis en bebés

Para prevenir la conjuntivitis en bebés es importante:

  • Mantener una buena higiene ocular y lavarse las manos antes y después de tocar los ojos o aplicar el tratamiento.
  • Evitar el contacto con personas que tengan conjuntivitis u otras infecciones respiratorias.
  • Proteger los ojos del bebé del sol, el viento, el polvo y otras sustancias irritantes.
  • Identificar y evitar los alérgenos que puedan causar conjuntivitis alérgica.
  • Acudir al médico ante cualquier signo de conjuntivitis o molestia ocular.

La conjuntivitis en bebés es una afección frecuente y en la mayoría de los casos se cura sin complicaciones. Sin embargo, es importante seguir las recomendaciones médicas y mantener una buena higiene para evitar el contagio y favorecer la recuperación.

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