Sociedad Civil defiende a Le Senne por la retirada de las fotos de Picornell, ‘La Pasionaria’ de Mallorca
Societat Civil Balear (SCB), la entidad constitucionalista que preside Tomeu Berga, ha emitido un comunicado en el que defiende la decisión del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, de ordenar la retirada de las fotos de Aurora Picornell, una víctima del franquismo conocida como La Pasionaria de Mallorca, que exponían dos diputadas socialistas miembros de la Mesa de la Cámara autonómica. SCB denuncia «la grave manipulación que hace la izquierda» de la actuación de Le Senne.
Durante el pleno del pasado martes, que debatía la derogación de la Ley de Memoria Democrática, Le Senne expulsó de la sala de plenos a la vicepresidenta segunda de la Mesa, Mercedes Garrido, y la secretaria segunda del Parlament, Pilar Costa, ambas del PSOE, tras negarse a retirar las fotos de Aurora Picornell.
La figura de Aurora Picornell está siendo estos días idolatrada por los partidos de la izquierda y utilizada para atacar a PP y Vox. La izquierda homenajea constantemente a Picornell por su condición de víctima del franquismo al tiempo que ignora por sistema a las personas asesinadas por el bando republicano.
La represión de este bando fue especialmente cruenta en Menorca, donde tuvo una relevancia especial la actuación del marido de Aurora Picornell, Heriberto Quiñones, autor intelectual de uno de los episodios de represión más sangrientos de la Guerra Civil, el asesinato a sangre fría en noviembre de 1936 de mas de 70 personas prisioneras del bando republicano en el barco Atlante, anclado en el puerto menorquín de Mahón.
En su comunicado, Sociedad Civil Balear indica en primer lugar que la nueva mayoría en la Cámara de PP y Vox acordó derogar la Ley de Memoria «por su carga ideológica que ha venido imponiendo la izquierda balear desde 2015 hasta 2023».
SCB recuerda que durante el pleno, «los diputados de la izquierda mostraban fotos de claro significado y que en ningún momento Gabriel Le Senne hizo mención a ellas. Solamente a las fotos mostradas en la Mesa del Parlament».
De acuerdo con el reglamento, dice SCB, «la Mesa debe ser escrupulosa en su carácter neutral, puesto que su mandato es representar a todo el arco
parlamentario presente en el hemiciclo. En consecuencia es una
vulneración del principio que guía sus actuaciones que algún miembro de
la Mesa se comporte sin honor ni decoro, mostrando cualquier símbolo
que rompa esa neutralidad».
Según Sociedad Civil Balear «es importante hacer llegar a la opinión pública que de suceder una anomalía en la Mesa, el presidente de la Cámara está en la obligación de llamar al orden a cualquiera de los miembros que vulnere
el principio de neutralidad, y que de persistir llegado el tercer aviso,
deberá ser expulsado de la sala, como así ocurrió, con el consiguiente
rasgamiento de vestiduras en una actitud hipócrita de los diputados de
los grupos de izquierdas».
En su comunicado, Sociedad Civil Balear insiste en el «actitud hipócrita» de la izquierda. «Los partidos de izquierda eran plenamente conscientes
de que se estaba produciendo una flagrante provocación que no tiene
perdón y tampoco justificación alguna, puesto que las dos socialistas
miembros de la Mesa expulsadas, Mercedes Garrido y Pilar Costa,
previamente ocuparon cargos de alta responsabilidad durante el Pacte de
Progres (2015-2023), y aun así se olvidaron de ejercer el talante
institucional que se les suponía».
SCB recuerda que una vez expulsadas, «testigos presenciales en el salón de los pasos perdidos pudieron comprobar cómo entre risas lo único que les preocupaba a Garrido y Costa era si el incidente se había grabado convenientemente. Hubo entonces provocación».
Prohens sobre Aurora Picornell
«Desde Societat Civil Balear lo único que lamentamos es que el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, se precipitase en lugar de encomendar a los ujieres de la sala que procedieran a la expulsión de estas dos socialistas», prosigue el comunicado.
SCB también lamenta la premura de la presidenta Marga Prohens en decir que «no se puede faltar el respeto a las víctimas», viniendo así a dar por bueno, que Le Senne rompió una fotografía conscientemente, cuando fue
consecuencia del forcejeo con Mercedes Garrido».
Lo que, además, según han denunciado, «servía para darle más alas al perverso relato de esta izquierda guerracivilista» que no tardó en manifestarse en el exterior del Parlament, al grito de «¡Prohens, Le Senne, son lo mismo!», lo que, para la asociación, «viene a confirmar que la izquierda balear no parará», y que «le da lo mismo» que la líder del PP marque «un cordial alineamiento», con ese «no se puede faltar el respeto a las víctimas».
«Todo ya estaba perfectamente orquestado, con el único objetivo de dañar la imagen del centro derecha», ha denunciado Societat Civil Balear que, ante esta actitud de la izquierda, «que persistirá a lo largo de la legislatura con el único objetivo de demonizar al contrario», según ha considerado, «no cesará en recordarle a la opinión pública balear las malas artes de quienes solamente buscan regresar al poder para menospreciar a la población».