Rebelión contra Arrimadas en Baleares: 3 de los 5 diputados se sublevan y nombran un nuevo portavoz

La hecatombe de Ciudadanos en las elecciones del pasado martes en la Comunidad de Madrid ha abierto una nueva crisis en la formación naranja en Baleares que ahora se traduce en un rebelión contra el sector más próximo a Inés Arrimadas. Tres diputados de Ciudadanos en el Parlament balear liderados por el ex portavoz Marc Pérez Ribas se han sublevado contra la líder del partido en las islas, Patricia Guasp. Pérez Ribas y los diputados Jesús Méndez y Maxo Benalal han decidido por su cuenta y riesgo defenestrar a Patricia Guasp como portavoz en el Cámara balear y para ello han registrado un escrito en el Parlamento solicitando un cambio de portavoz. Mediante este escrito Pérez Ribas se autoproclama nuevo portavoz en sustitución de Patricia Guasp.

La dirección de Ciudadanos ya ha anunciado que «no respalda» en ningún caso el escrito presentado a la Mesa del Parlamento balear y advierte de que si finalmente se adopta la decisión solicitada se presentará de inmediato un recurso siguiendo los cauces reglamentarios y legales previstos.

Además, la dirección de la formación naranja ha abierto expediente informativo a los parlamentarios implicado en el golpe de mano con la finalidad de aclarar lo sucedido antes de proceder a su expulsión del partido.

Todo esto sucede tras los fracasos de Ciudadanos en Cataluña y Madrid y cuando cuatro diputados de Ciudadanos en las Cortes Valencianas acaban de abandonar el partido al considerar que la formación ha abandonado los principios liberales que les llevaron a sumarse a este proyecto, según el escrito divulgado por los cuatro críticos. Consideran, además, que Ciudadanos «es ahora una muleta del sanchismo» y culpan de ello a Inés Arrimadas.

Lo de Ciudadanos en la Comunidad Valenciana se repite ahora en Baleares aunque en este caso los críticos no han abandonado el partido si bien con toda probabilidad serán expulsados.

Marc Pérez Ribas fue el candidato de Ciudadanos en las elecciones autonómicas de 2019 y se convirtió en portavoz de la formación en el Parlamento balear. No obstante, el pasado mes de noviembre la dirección nacional de la formación naranja que lidera Inés Arrimadas impuso a Patricia Guasp como portavoz y a Pérez Ribas como su adjunto. Todo esto coincidió con el nombramiento por parte de la dirección nacional de Guasp como nueva líder de Ciudadanos en Baleares con el cargo de coordinadora y portavoz autonómica.

Ciudadanos Baleares quedó descabezado y sin dirección cuando contra todo pronóstico Marc Pérez Ribas ganó las primarias para la candidatura de las autonómicas de 2019 al entonces líder indiscutible de la formación Xavier Pericay. Fueron unas primarias que siempre han estado bajo sospecha pero que a la postre supusieron la retirada de Pericay como coordinador de la formación en Baleares y con él desaparecieron del mapa político todas las personas que conformaban su equipo. La dirección nacional, sin embargo, entonces con Albert Rivera al frente, respaldó desde el primer momento a Pérez Ribas pero una vez iniciada la legislatura le retiró el apoyo para apostar por Patricia Guasp como líder aupada por el malogrado Joan Mesquida, que ejercía como portavoz del partido.

Con Patricia Guasp como coordinadora y portavoz en el Parlamento balear, Ciudadanos dio un vuelco a su forma de ejercer la oposición. Primero suavizó sus ataques al pacto de izquierdas que preside la socialista Francina Armengol para a continuación facilitarle la aprobación de los presupuestos y apoyarla en cuestiones tan importantes como el Pacto por la Reactivación Económica y muchas de la polémicas medidas adoptadas por el Govern balear en relación a la gestión de la pandemia y la crisis económica.

En las elecciones autonómicas de 2019 Ciudadanos consiguió cinco diputados y pudo así formar Grupo Parlamentario. Ahora, con la expulsión de tres diputados, Ciudadanos ya no podrá tener Grupo Parlamentario y perderá así visibilidad y muchos recursos. Mientras, los tres diputados díscolos, que conservará su acta, pasarán al grupo de No Adscritos aunque no se descarta que tarde o temprano se pasen al PP.

Es ya la segunda vez en tres años que Ciudadanos inicia en Baleares un proceso de autodestrucción. Primero fue en 2019 con la defenestración de Xavier Pericay y su equipo, lo que se tradujo en unos malos resultados electorales. Ahora, tres diputados díscolos provocará la desaparición del Grupo Parlamentario de Ciudadanos.