El ‘Echenique balear’: denuncian otra vez a un alto cargo de Armengol por tener una asistenta en negro

Un alto cargo del Govern de Armengol ha sido denunciado por segunda vez por su reincidencia en el denominado caso Echenique de Baleares. El alto cargo de la Conselleria de Salud fue denunciado inicialmente por tener durante 17 años a una empleada de hogar sin contrato y sin estar de alta en la Seguridad Social. Ahora, el mismo alto cargo ha sido denunciado en Inspección de Trabajo por otra trabajadora de hogar, sobrina de la primera,  que ha estado un año y cuatro meses sin contrato.

Se trata del director gerente de Atención Primaria, Miquel Caldentey, el número 3 de la Conselleria de Salud que preside la socialista Patricia Gómez. La empleada de hogar que ha denunciado el nuevo caso es M. Y., que es la persona que sustituyó a su tía como asistente de Miquel Caldentey y familia cuando esta fue despedida después de prestar sus servicios durante 17 años sin contrato ni Seguridad Social.

El caso de Miquel Caldentey es similar al del portavoz de Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, Pablo Echenique, que mantuvo a su asistente personal sin contrato durante más de un año. Por ello, fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Aragón a pagar una multa de 11.040 euros.

El tema de Miquel Caldentey, aparte de la reincidencia, es más grave dado que la primera empleada de hogar estuvo sin contrato durante 17 años y la segunda, un año y cuatro meses.

M. Y. cuenta que los problemas empezaron cuando le solicitó a Caldentey que le hiciera un contrato puesto que lo necesitaba para poder renovar el NIE. Desde el primer momento, la asistenta recibió la negativa por  respuesta y, además, fue despedida con la excusa de que su tía le había denunciado.

Según cuenta M. Y., el alto cargo de la Conselleria de Salud le dijo que había sido dada de alta en la Seguridad Social,  algo que resultó ser falso según  un informe emitido por el Ministerio de Trabajo y Economía Social a petición de la trabajadora y que obra en poder de OKDIARIO.

Caldentey se negó a contratar a la primera empleada de hogar y ahora ha hecho lo mismo con la segunda. Además, actuó  judicialmente contra la primera y otras dos personas cuando éstas le presionaron a pagar una indemnización de 10.000 euros.

La primera empleada de hogar es una mujer nacida en Colombia, de iniciales M. F., que estuvo trabajando en la casa de la madre de Caldentey desde el año 2003 hasta febrero de 2021, cuando por motivos particulares tuvo que desplazarse a su país durante un mes.

Al regresar a Mallorca, fue despedida por Caldentey y se quedó sin trabajo y derecho a percibir prestación al no haber tenido nunca un contrato de trabajo ni estar de alta en la Seguridad Social. Tampoco percibió indemnización alguna por su despido.

La hija de M.F. decidió, entonces, enviar un whatsapp a Miquel Caldentey, el 18 de marzo de 2021, exigiéndole el abono de 10.000 euros como compensación para su madre por el despido y le amenazó con presentar denuncia en la Seguridad Social si no recibía el dinero. Al tratarse de un cargo público, también le amenazó con acudir a la prensa para denunciar que su madre había estado trabajando 17 años como empleada de hogar sin contrato y sin Seguridad Social.

Una tercera mujer vinculada a las otras dos llamó por teléfono a Caldentey para presionarle a pagar los 10.000 euros.

La reacción del director gerente de Atención Primaria fue no pagar ninguna cantidad y, además, denunciar los hechos ante la Policía Nacional acusando a las tres mujeres de coacciones. La empleada de hogar fue condenada a pagar una multa.

Miquel Caldentey ya fue noticia en 2020 al ser una de las personas con alto cargo en el Govern de Armengol que se saltó el turno de vacunación. Recibió  una de las primeras 165 dosis que llegaron a Baleares. Estas dosis estaban destinadas a los mayores de las residencias.

La consellera de Salud, Patricia Gómez, salió entonces en defensa de Caldentey y de los otros altos cargos que se habían colado en el proceso de vacunación alegando que al ser Navidad algunos usuarios de las residencias de mayores se encontraban con sus familias y que por ello sobraron vacunas.