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40 camiones y barredoras de la empresa de limpieza de Palma, sin refrigeración en el verano más caluroso

Palma empresa limpieza
Incendio de una barredora de la empresa municipal de limpieza Emaya.
Indalecio Ribelles
  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

En el verano más caluroso que se recuerda en Baleares, con temperaturas que sobrepasan los 30 grados casi a diario, la empresa municipal de limpieza de Palma (Emaya) -presidida por el concejal socialista de Medio Ambiente, Ramón Perpinyà- tiene a más de 40 trabajadores del servicio de recogida de basuras y mantenimiento trabajando en camiones y barredoras sin aire acondicionado. Todo ello a pesar de las quejas y reclamaciones de los conductores ante el riesgo de sufrir un golpe de calor.

En estos momentos, hay más de 110 empleados de baja por accidentes que muchos achacan a las altas temperaturas que deben soportar en horario diurno y nocturno, teniendo en cuenta las tórridas noches de este verano.

La avería de los sistemas de refrigeración del parque móvil de Emaya es algo conocido por toda la dirección de la compañía, que no hace un mantenimiento adecuado de esta maquinaria de limpieza, ni de los camiones de recogida de basuras, lo que ha obligado a estos conductores a interrumpir su jornada laboral cada cierto tiempo para poder refrescarse.

Una situación que no se entiende demasiado ya que la empresa cuenta con un servicio propio de taller en el que trabajan más de 60 mecánicos.

En el caso de las barredoras pequeñas, se da la circunstancia de que no alcanzan la temperatura de refrigeración, porque cuando se adquirieron ya eran muy deficitarias en este extremo para aguantar toda una jornada laboral. Aunque su arreglo es imposible, se siguen utilizando.

De hecho, la barredora que salió ardiendo el pasado martes frente a la gasolinera de la calle Eusebio Estada de la capital balear acababa de salir el día antes del taller.

Nada más dejar el operario el vehículo para comunicar su avería, se incendió, en un siniestro donde afortunadamente no hubo que lamentar daños personales. El incidente no cogió por sorpresa a los empleados públicos de la compañía, hartos de denunciar esta situación sin que la dirección adopte medidas.

Riesgo alto de incidencia

Los que conducen estos vehículos sin aire acondicionado han salido a trabajar con riesgo alto de incidencia por altas temperaturas, según los técnicos de prevención de Emaya.

La negativa de la empresa a llevar a cabo un sistema periódico de revisión de la refrigeración de toda la flota de vehículos viene de años atrás, pero las temperaturas extremas de este verano no han hecho más que acentuar los problemas. Camiones y barredoras son retirados de la ruta sólo cuando tienen un problema, y una vez arreglada la avería, salen de nuevo a la calle sin realizar un seguimiento diario de su estado.

Si bien desde el servicio de prevención de Emaya se ha reclamado la presencia de especialistas en sistema de refrigeración, sólo este verano la empresa ha accedido a ofrecer un curso de formación en la materia. Pero sólo hay dos empleados en talleres dedicados a ello que no dan abasto para la reparación de los vehículos.

La dirección de la empresa ha achacado las múltiples averías a la falta de pericia de los conductores para hacerse cargo del mantenimiento adecuado del sistema de refrigeración, algo que los trabajadores rechazan dada su desconocimiento total sobre la materia.

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