Siete narcos acorralados con un AK-47 y 2.500 kilos de droga se entregan a la Guardia Civil en Cádiz
Tras alijar 64 fardos en las orillas del Guadalquivir, los agentes les siguieron hasta una finca de Sanlúcar
Se han incautado tres armas cortas y un fusil de asalto
La Guardia Civil ha detenido este martes a siete narcotraficantes que tras alijar más de 60 fardos de hachís en la desembocadura del río Guadalquivir fueron acorralados en una finca de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), por lo que se acabaron entregando a las autoridades. Los agentes han intervenido cuatro armas, entre ellas un fusil de asalto (AK-47), todas ellas con sus respectivas municiones y listas para abrir fuego. Los arrestados son de nacionalidad española, francesa y marroquí, y el peso de la droga incautada ronda las 2,5 toneladas.
El operativo, enmarcado en la operación Carteia, se ha producido en la madrugada de este martes, cuando distintas unidades de la Guardia Civil implicadas en la lucha contra el narcotráfico en el Guadalquivir se encontraban desplegadas ante la certeza de que iba a tener lugar un alijo en la zona.
La intensificación de la vigilancia por medios SIVE (radares fijos y móviles) permitió detectar una embarcación que navegaba con rumbo norte. Por las características de la misma y la «experiencia de los agentes» se presagiaba la introducción de mercancía ilícita río arriba.
El seguimiento de la narcolancha permitió localizar el punto de alijo, donde esperaban cuatro vehículos todoterreno y un grupo de individuos preparados para la descarga.
Los agentes observaron cada paso del alijo y siguieron a los vehículos hasta la guardería de droga, que se ubicaba en una zona agrícola de Bonanza, en el término municipal de Sanlúcar de Barrameda. Una vez allí, la Guardia Civil rodeó toda la finca para impedir la huida de los sospechosos.
El operativo resultó de tal magnitud que a los narcos no les quedó otra opción que entregarse sin utilizar ninguna de las armas con las que contaban, todas ellas municionadas y listas para ser utilizadas.
Al filo de las 3:00 horas la Guardia Civil detuvo a los siete integrantes de la organización. Además, se incautaron 64 fardos de hachís envueltos en sacos de arpillera, cuyo peso, pendiente de confirmar, será cercano a los 2.500 kilos. También se intervinieron tres armas cortas, un fusil de asalto y cuatro vehículos todoterreno cargados, más un quinto ubicado en el interior de la finca, así como abundantes pruebas y documentación relativa a los hechos investigados.
Los detenidos, la droga y todo lo requisado ha sido trasladado a la comandancia de la Guardia Civil de Cádiz para la confección de las oportunas diligencias. El operativo sigue en marcha y no se descartan nuevas detenciones.