Investigan los privilegios de Miguel Carcaño en la cárcel a cambio de «favores sexuales» a una funcionaria
El asesino confeso de Marta del Castillo ha tenido en su poder, incluso, un ordenador y otros dispositivos con Internet
Carcaño también "trapichea con Viagra", "juega mucho al póker" y "vende ropa"
La funcionaria de la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) ha sido trasladada de módulo


Miguel Carcaño estaría disfrutando de «privilegios» en la cárcel por los «favores sexuales» del asesino confeso de Marta del Castillo a una funcionaria de prisiones. Algunos de los presos han denunciado un caso similar al de Ana Julia Quezada, es decir, un trato de favor a Carcaño, que fue condenado en 2009 a 21 años de cárcel. Está a cinco años de su puesta en libertad: saldrá de prisión en 2030, con 46 años, mientras que Antonio del Castillo y Eva Casanueva siguen sin poder dar sepultura a su hija 16 años después de su asesinato en Sevilla.
Un interno del centro penitenciario de alta seguridad de Herrera de la Mancha (Ciudad Real), ex compañero de celda de Carcaño, ha revelado que la funcionaria aprovechaba que «iba a abrirle la panadería» -donde Carcaño realiza labores diarias- para sus encuentros, y que gracias a los «intercambios» sexuales habría conseguido todos los objetos prohibidos que las autoridades penitenciarias han encontrado en posesión del asesino confeso de Marta del Castillo.
Por el momento, a Carcaño le ha caído un mes de aislamiento. Instituciones Penitenciarias lo ha sancionado y se le ha trasladado a un módulo de presos conflictivos. A la funcionaria la han cambiado de módulo y está siendo investigada. Los padres de Marta del Castillo han pedido que se llegue hasta el fondo del asunto.
«Le han cogido una tablet, un teclado del ordenador de goma, un aparato de Wifi, un USB, 110 paquetes de tabaco allí, de estar trapicheando», ha indicado su ex compañero. Esto significa que tenía un ordenador y otros dispositivos con acceso a Internet. Asegura que todo el mundo en la cárcel lo sabía. Los objetos han sido incautados ya.
Asimismo, el preso excarcelado subraya que Miguel Carcaño también tenía acceso a un teléfono móvil que le encontraron en uno de los cacheos. Todo lo habría conseguido por esos «favores sexuales», a excepción del tabaco, que habría logrado por sus «trapicheos con Viagra» o por las partidas de cartas: «Juega mucho al póker».
«Todo el mundo dice que esta funcionaria le ayudó a que metiese todo eso en la cárcel (…) No es normal que recibas todo eso, porque te sometes a cacheos cuando pasan los familiares, y cuando sales. Tiene de todo ese niño», han declarado por su parte algunos familiares de otros internos al programa Código 10.
Al parecer, la funcionaria «echa la cara al lado» si le ve haciendo algo indebido y «seguramente le avisaba de los registros» para evitar que le pillaran con todos esos objetos. Ninguno de los dos disimulaba, según el relato del excarcelado, que apunta cómo pasaban «una hora hablando en el patio, en mitad del pasillo o cuando iba a la panadería, que tardaba mucho en salir». «Siempre estaban hablando», hasta el punto de que ella «se metía» en su celda para conversar con el asesino de Marta del Castillo.
Aun con todo ello, también se investiga si el capellán, el voluntariado de Cruz Roja o la pastoral penitenciaria habrían dado algún tipo de trato de favor a Carcaño.
Por otro lado, Miguel Carcaño percibe la nómina más alta por trabajos productivos en prisión, con una cantidad que puede alcanzar los 800 euros al mes, que se suman al peculio (el dinero para el economato o para las llamadas telefónicas, por ejemplo). Carcaño se encarga de hacer los bollos en la panadería para todas las comidas de los presos.
La familia de Marta del Castillo pidió a la Audiencia Provincial de Sevilla que se le embargara el salario, aunque no se ha hecho porque, al cobrar por debajo del sueldo mínimo, éste es imbargable. Aunque lo cierto es que el colchón de Carcaño se incrementa vendiendo ropa, con las partidas de póker y con el trapicheo con Viagra. Pese a ello, sigue sin pagar a la familia de la víctima los 360.000 euros a los que también fue condenado.
Según relatan los presos, Carcaño tiene novia fuera, una chica que le ha visitado varias veces en la cárcel. La actitud del asesino confeso de Marta del Castillo es «chulesca», porque se ha ido haciendo «un hueco» en el centro penitenciario y, al llevar tantos años en él, «se cree que manda allí». «Se cree especial y es prepotente, pero no habla nada sobre Marta del Castillo», detallan.
Carcaño sigue sin confesar dónde está el cuerpo de Marta del Castillo, del que se deshizo con la ayuda de Samuel Benítez Pérez, según sus confesiones. Mientras tanto, los padres de la joven asesinada, siguen peleando para conocer el paradero de su hija.