Ciudadanos retomó su pacto con un alcalde procesado del PSOE sólo 6 días después de los indultos
Si Salvador entrega Granada al socialista Cuenca, serán ya dos las plazas donde Cs pacta con regidores procesados
Cs vuelve a la vía murciana en Granada y hará alcalde con Podemos a un socialista imputado
Ciudadanos retomó su pacto con el PSOE en el municipio sevillano de Bormujos apenas seis días después del indultazo de Pedro Sánchez a los condenados por el golpe de Estado de Cataluña. Los naranjas lo hicieron además volviendo a estrechar la mano de los socialistas capitaneados por el socialista Francisco Molina, procesado por prevaricación. En la misma situación judicial se encuentra su compañero Francisco Cuenca, al que este miércoles apoyará el ex regidor naranja Luis Salvador para que asuma el bastón de mando del Ayuntamiento de Granada.
En el caso de Bormujos, Molina se comprometió a delegar la Alcaldía de manera «accidental» en uno de los miembros del grupo socialista hasta que la Audiencia de Sevilla resuelva los recursos de apelación formulados en el procedimiento judicial que afronta. El juicio se celebrará el próximo octubre.
En concreto, el grupo de Cs, comandado por Manuel Romero, rompió a mediados de marzo el acuerdo que tenía con el PSOE y gracias al cual cogobernaba en el Ayuntamiento junto a los socialistas, esgrimiendo la la negativa del alcalde y de su edil de Obras Públicas, la también socialista Carmen Garfia, a dimitir por presunta prevaricación en una licencia de obras.
Sin embargo, según trascendió el pasado 28 de junio -tres meses después y con el alcalde todavía sin dimitir-, el partido de Inés Arrimadas optó por volver a pactar con el PSOE, pese a que el Gobierno de la Nación, integrado por los socialistas y Unidas Podemos, había firmado el indulto a los condenados del 1-O sólo seis días antes, el 22 de junio.
El portavoz de Ciudadanos y primer teniente de alcalde hasta marzo, Manuel Romero, manifestó que «a diferencia de otros grupos», el suyo no defiende «intereses partidistas», sino el bien de la localidad. «Somos cinco concejales que venimos de la sociedad civil y que dimos un paso hacia la política con el único interés de mejorar el pueblo y la vida de los nuestros vecinos», apostilló Romero para justificar su acuerdo con los socialistas. PP y Vox había pactado una moción de censura, a la espera de que se sumara Cs.
Romero aludió al nuevo pacto con el PSOE del procesado Romero como «la única vía posible para dar estabilidad y certeza a los bormujeros en unos tiempos muy duros, en los que necesitan, más que nunca, un gobierno estable, preparado y que dé seguridad». Asimismo, el edil del partido de Arrimadas habló de «gesto de buena voluntad» de Romero después de que, en lugar de dimitir, como pedía Cs en marzo, se haya comprometido a hacer «un paréntesis hasta que se resuelvan los recursos interpuestos en la Audiencia provincial, en defensa de su presunción de inocencia». «A nosotros nunca nos encontrarán en la destrucción y la crispación, sino en la construcción y los acuerdos», manifestó Romero.
El caso de Granada
Bormujos es uno de los 19 principales municipios del país donde Ciudadanos mantiene sus pactos con el PSOE y el PSC pese al indultazo de Sánchez a los golpistas, tal y como publicó OKDIARIO la pasada semana. Si finalmente el dimitido alcalde de Granada, Luis Salvador, de Ciudadanos, entrega la alcaldía al socialista Francisco Cuenca, tras romper con los populares, serán ya dos los Ayuntamientos donde Ciudadanos pacta con regidores procesados.
Cuenca fue imputado por la posible comisión de los delitos de usurpación de funciones y de prevaricación en la adjudicación de contratos para el seguimiento y verificación de cursos de formación profesional para la economía social. Ello tuvo lugar durante la etapa en que ejerció como delegado provincial de la Consejería de Economía e Innovación de la Junta de Andalucía.