El pueblo de Granada lleno de rutas que es perfecto para disfrutar de un fin de semana de naturaleza
Disfrutar de un fin de semana de naturaleza es posible en este pueblo de Granada
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Disfrutar de un fin de semana de naturaleza es algo que podemos hacer antes en un pueblo de Granada lleno de rutas. Podremos descubrir una serie de elementos que son fundamentales y que quizás nos ayudarán a ahorrar un poco sin renunciar a nada.
España es el mejor destino de vacaciones posible que queremos descubrir por momentos. Sin necesidad de coger un avión y con la mirada puesta en aquello que nos está esperando. Un destino de cuento de hadas lo tenemos en Granada.
Este es el pueblo ideal para un fin de semana de naturaleza
Ha llegado el momento de empezar a prepararnos para poder descubrir un pueblo de Granada lleno de rutas. La llegada del verano nos hace disponer de más tiempo libre, pero también de ganas para poder invertirlo correctamente. Las escapadas de fin de semana o de vacaciones, pueden ser lo que necesitamos.
Vamos a lanzarnos en busca de un cambio que podría acabar siendo el que necesitamos. Dejar atrás la ciudad para entrarnos en un ambiente rural acabará marcando un antes y un después. Habrá llegado el momento de empezar a prepararnos para parar un poco, detener el tiempo y dedicarnos a lo que queremos.
La opción de quedarnos en España es la acertada. Con menos presupuesto para viajar, estar cerca de casa puede ser un acierto. Pero también pensando en nuestro propio bienestar. Estar pendiente de esos puntos del país en los que debemos empezar a prepararnos para afrontar este cambio es fundamental.
Andalucía es un destino de vacaciones impresionante. Quizás podemos empezar a pensar en cómo disfrutar de estos pueblos que esconde una comunidad autónoma con un clima, pero también con una variedad gastronómica y paisajes que son fundamentales para poder disfrutarse.
Cerca de casa y con todo lo necesario para poder descubrir todo un universo de buenas sensaciones, llega el momento de empezar a pensar en estas escapadas o vacaciones que hay por delante. Una opción de lo más recomendable es descubrir Granada y sus pueblos. No solo una capital con puntos increíbles para poder perderse.
Te proponemos una escapada a un pueblo de fin de semana o durante un puente largo o incluso si quieres aprovechar las vacaciones para relajarte en un lugar en el que el paisaje es un elemento fundamental.
Está lleno de rutas y es un pueblo de Granada en el que perderse
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Habrá llegado el momento de planificar una escapada a un lugar que merece la pena descubrir. Castril es un municipio que se encuentra a más de 800 metros sobre el nivel del mar, por lo que es un lugar ideal para escapar un poco de calor en verano. Una opción, la de montaña, que viene acompañada de algunas novedades importantes.
De este pueblo destacan unas rutas ideales para los amantes del senderismo. Caminar un poco, moverse y estar preparado para disfrutar del tiempo libre es algo esencial. Vas a poder conectar directamente con una serie de elementos que son fundamentales para todo ser humano. Esa tranquilidad de saber que estás en un sitio ideal para toda la familia, con un paisaje y una historia que hay que recordar.
Desde la web del Ayuntamiento nos descubren la historia de este pueblo de Granada que debemos descubrir: «La historia de Castril se remonta a tiempos prehistóricos, como lo demuestran los numerosos hallazgos arqueológicos encontrados en la zona. Durante el periodo ibérico, la región estuvo habitada por la tribu de los bastetanos, quienes construyeron un asentamiento fortificado en la zona conocida como «El Castellón». Este lugar fue utilizado tanto por los bastetanos como por los romanos, posteriormente como una posición estratégica debido a su ubicación en un cerro elevado y con vistas al río Castril. Con la llegada de los romanos, Castril se convirtió en un importante enclave militar y económico. Los romanos construyeron una fortaleza y una red de caminos en la región. Además, aprovecharon los recursos naturales de la zona, como la explotación minera y la agricultura. Tras la caída del Imperio Romano, Castril fue ocupado por los visigodos y más tarde por los árabes durante la invasión musulmana de la península ibérica. Durante el periodo de dominio musulmán, la localidad adquirió el nombre de Qaṣṭīl, que significa «castillo» en árabe. La presencia árabe dejó una huella importante en la arquitectura y la cultura de la zona. En el siglo XIII, durante la Reconquista cristiana, Castril fue conquistado por las tropas del rey Alfonso VIII de Castilla. Posteriormente, la localidad pasó a formar parte del reino de Granada bajo el dominio de los nazaríes. En 1488 la fortaleza capituló ante las fuerzas de los Reyes Católicos. Tras la toma de la fortaleza, la población originaria abandonó prácticamente el lugar, bien por ser familias de las fuerzas nazarís bien por temor a los nuevos conquistadores; el resultado fue el despoblamiento casi total de la villa. Los Reyes Católicos otorgaron el Señorío de Castril a su secretario Hernando de Zafra como recompensa a sus muchos servicios y en el se incluía «desde la hoja del árbol hasta la piedra del río«. Visto que D. Hernando, aparte de fiel servidor de los reyes, era un hombre de negocios comprendió bien pronto que pocas rentas podía obtener de un lugar despoblado y si gastos del mantenimiento de la fortaleza y su guarnición, por lo que el 13 septiembre de 1490 otorgó una «Carta Puebla» para la repoblación de Castril, hecho curioso es que fue la primera Carta Puebla no otorgada ni promovida directamente por el poder real en los nuevos territorios conquistados a los nazarís. En la actualidad, Castril es conocido por su belleza natural y su entorno montañoso. El Parque Natural de Castril, situado en los alrededores, ofrece una gran diversidad de paisajes y es un destino popular para el turismo rural y el senderismo».