Piden 107 años de cárcel para el ‘Pelicot catalán’ por violar y prostituir a una niña de 12 años

Lo que vino después supera cualquier pesadilla: la llevó a su casa, la violó repetidamente y después la ofreció a través de Instagram a otros adultos suplantando su identidad para que también abusaran de ella mientras él grababa las escenas. Todo un catálogo del horror que ha dejado a los investigadores de los Mossos d’Esquadra impactados.

En el curso de la investigación policial, cuando las fuerzas del orden irrumpieron en el domicilio de este delincuente encontraron un verdadero arsenal de pornografía infantil: más de 10.000 archivos en los que aparecían menores siendo abusados, incluidos bebés. En su teléfono móvil guardaba 232 fotografías de la víctima «sometida a tocamientos y penetraciones por parte del procesado y otros hombres», así como 576 vídeos y 889 fotografías de pornografía infantil, según ha explicado la Fiscalía.

Y esto es solo la punta del iceberg. La investigación ha destapado una auténtica red de pederastas que operaba en Barcelona. Ya se han detenido a 16 presuntos agresores y se intenta identificar a otros 14. El juez mantiene abiertas dos causas separadas para investigar al resto de depravados que aparecen en las imágenes.

«Los agresores son personas de todos los estatus sociales, de entre 19 y 50 años», explicó el jefe del Área de Cibercrimen de los Mossos. Ya se ha localizado a 11 víctimas, dos chicas y nueve chicos de entre 12 y 17 años, pero podría haber al menos 14 más.

La víctima principal de este monstruo, que ahora tiene más de 17 años, presenta secuelas psicológicas graves. Las agresiones sexuales continuadas «han afectado a su desarrollo psicomadurativo», según los informes. El fiscal no tiene dudas: estos hechos han ocasionado a la menor «un perjuicio moral derivado de la indignidad dimanante del conjunto de experiencias a las que la sometió el procesado».

A raíz de este terrible caso los expertos lanzan una alerta sobre los peligros que acechan a los menores en internet. «En las aplicaciones de citas hay un mercado encubierto de prostitución de menores que no aflora», advierte el inspector Josep A. López. «Nadie dejaría a su hijo en Ciudad Juárez a las doce de la noche, pero Ciudad Juárez está en todas las casas en cada momento si no sabemos qué hacen nuestros hijos en Internet».

Aunque la Fiscalía pide 107 años de cárcel, en caso de condena máxima, el acusado cumpliría un total de 36 años de prisión. Además, se solicitan 60 años de orden de alejamiento, 115 años de prohibición de trabajar con menores y 10 años más de libertad vigilada.

La brutalidad del caso recuerda al francés Dominique Pelicot pero con una víctima menor de edad y que no es pareja del acusado. Este depredador será el primero de esta red en llegar a juicio en la Audiencia de Barcelona.