Condenado a 24 años de cárcel el asesino de la tendera de Tirso de Molina (Madrid)
El asesino mató a puñaladas a la tendera para robarle el móvil y 200 euros
El asesino actuó con "alevosía y ensañamiento"

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 24 años y 3 meses de prisión al asesino que en 2023 mató salvajemente a una tendera de un establecimiento de la céntrica plaza de Tirso de Molina de la capital, para robarle el teléfono móvil y 200 euros de la caja registradora.
La sentencia llega tras el veredicto del jurado que declaró culpable a Jesús M.S. de asesinar el 3 de julio de 2023 a la mujer, que regentaba una tienda en dicha plaza madrileña. La mujer que acompañaba al asesino de la tendera, Estrella G.S.R. ha sido condenada como encubridora del delito de robo.
La Audiencia Provincial impone al principal acusado 20 años de cárcel por un delito de asesinato con las circunstancias agravantes de alevosía y ensañamiento, más 4 años y 3 meses por robo con violencia y arma, y condena a Estrella G.S.R. a 6 meses de prisión por el encubrimiento.
El asesino la atacó por la espalda
La sentencia considera probado que ambos entraron en el establecimiento cuando se encontraba abierto al público, mantuvieron una conversación con la víctima y aprovechando que la víctima estaba de espaldas, el acusado extrajo un cuchillo con el que la amenazó mientras la agarraba del pelo para que le entregase el dinero. Añade que Estrella G.S.R. salió del local en el momento en el que Jesús M.S. comenzó la agresión sin que conste que tuviera conocimiento de las intenciones delictivas de su acompañante.
La resolución explica que se considera que Jesús M.S. actuó con alevosía, ya que una vez que se hizo con el botín trató de introducir a la víctima en uno de los probadores de la tienda pero al no conseguirlo «le clavó de manera súbita e inesperada el cuchillo que portaba en el tórax».
El asesino se ensañó: 8 puñaladas
El tribunal aprecia la agravante de ensañamiento ya que después de la primera puñalada le volvió a clavar el cuchillo en otras siete ocasiones en la nuca y el cuello «con el fin de generar el mayor daño y dolor posibles».
La sentencia declara probado que una vez cometidos los delitos Jesús M.S. se reunió con Estrella G.S.R. en un hostal cercano donde además de esconderse de la Policía, guardaron el móvil de la víctima después de que el primero le narrase lo sucedido en la tienda. Si bien la Fiscalía solicitaba que los acusados indemnizasen de manera conjunta a los familiares de la víctima en la cantidad de 441.860 la sentencia dicta que solamente será Jesús quien abone la totalidad de dicha cuantía.