ZARAGOZA

Un colombiano intenta matar a los dos policías que le impedían agredir a su pareja

El agresor intentó clavarles unas tijeras de 11 cm en el cuello

El detenido había golpeado a su pareja antes de la llegada de los agentes

El SUP vuelve a pedir que se dote con dispositivos eléctricos a todos los policías en primera fila de la seguridad ciudadana

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Indignación entre los policías tras una nueva agresión a dos agentes cuando intentaba proteger a una víctima de violencia de género en Zaragoza. El agresor, un ciudadano de origen colombiano, atacó con unas tijeras de 11 centímetros de largo a los dos agentes que intentaba evita que hiciera lo mismo con su pareja.

Los hechos tuvieron lugar a las 7:00 horas de la mañana del pasado día 13 de octubre cuando los policías fueron comisionados a un domicilio de Zaragoza donde una mujer estaba siendo agredida violentamente por su pareja.

Una vez allí, la mujer abre la puerta a los policías y les indica que su pareja está refugiada en uno de los dormitorios de la casa a la vez que les solicita su ayuda «por favor ayudadme, llevároslo que me ha pegado» mientras los agentes observan que la víctima presentaba un fuerte golpe en el ojo y hay rastros evidentes de violencia en la habitación.

Los policías se encuentran al agresor tumbado desnudo en la cama y al advertirle que le iban a detener por violencia de género, el ciudadano colombiano se abalanzó sobre ellos gritando: «diles la verdad, yo no le he hecho nada», momento en que la víctima vuelve a pedirle a los policías su ayuda: «socorro, sacádmelo de encima».

En esos momentos de tensión, el agresor logra zafarse de los policías dándole un codazo en la cara a uno de los agentes y puñetazos y patadas a ambos. El sujeto agarró las tijera e intentó clavárselas en la cara y en el cuello a los agentes de forma repetida, aunque estos consiguieron evitarlo esquivando el filo.

Mientras los policías intentaban proteger a la mujer, el agresor consigue huir por las escaleras donde fue interceptado por otros policías acudían en ayuda de los primeros y también fueron atacados con las tijeras en el pecho, consiguiendo esquivar la tarascada. El agresor solo se rindió cuando uno de los agentes desenfundó su arma y le apunto de forma directa. La consecuencia directa fue el rescate de la mujer, el arresto de su pareja y tres policías que fueron asistidos de lesiones leves.

Desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) se muestran indignados con este nuevo ataque a unos agentes en el desempeño de sus funciones e insisten en que el Gobierno declare de forma inmediata el rango de profesión de riesgo para policías y guardias civiles, tal y como ocurre con otros colectivos de policías autonómicas y locales de España.

Igualmente, el SUP vuelve a reclamar con urgencia que se dote con chaleco anti punción y dispositivos eléctricos Táser a todos los agentes que trabajan en primera línea de la seguridad ciudadana.

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