Los testigos acorralan al conductor kamikaze que mató a un joven en la M50 de Madrid
Tres vehículos estuvieron a punto de sufrir el mismo destino que Víctor el joven de Rivas muerto tras chocar contra un kamikaze el 15 de septiembre en Madrid. Los testimonios ante la Guardia Civil de esos conductores apuntan que el kamikaze sí era consciente de lo que hacía, justo lo contrario de lo que dice el acusado. OKDIARIO ha tenido acceso a esos testimonios.
Víctor no era el único que circulaba la madrugada del 15 de septiembre por la vía de circunvalación m50 de Madrid. Antes que él otros se cruzaron con el kamikaze en su camino con más suerte que el joven de Rivas. Así lo explicaron ante los investigadores.
Primer grupo de testigos: una madre y su hija circulan por la vía cuando ven el coche que conduce Kevin Cui detenerse lentamente junto al arcén, encender las luces de emergencia y comenzar a dar un giro para incorporarse en dirección contraria.
A este primer vehículo con testigos, le sigue uno nuevo. Otro conductor pasa un minuto después que la madre y la hija y ve atónito como a lo lejos el coche del kamikaze, con las luces de emergencia termina de dar el giro, se incorpora en dirección contraria y acelera alcanzando una velocidad de unos 70 kilómetros por hora en dirección del testigo, cuando quedan unos metros el kamikaze comienza a darle ráfagas y sólo los reflejos permiten que el conductor lo esquive de un volantazo salvando su vida.
El kamikaze acelera en su carrera suicida cuando se cruza con un tercer grupo de testigos, esta vez se trata de un camionero y su mujer que ocupa el asiento de copiloto. Sus testimonios ante la Guardia Civil no deja duda. Los testigos ven aterrorizados cómo el coche de Kevin Cui, el kamikaze español de origen oriental, les pasa en dirección contraria a una velocidad que calculan de 200 kilómetros hora.
Este grupo de testigos desmontaría el principal argumento de la defensa de Kevin Cui, que insiste en que no era consciente de lo que ocurría porque circulaba triplicando la tasa de alcoholemia permitida. Sin embargo, conectar las luces de emergencia, maniobrar lentamente para luego acelerar hasta alcanzar una gran velocidad y dar las ráfagas a otros conductores que venían de frente son hechos que en principio no parecen cuadrar con los argumentos de la defensa.
Precisamente, hoy a las 12 del mediodía, uno de estos testigos comparece ante el juez de Coslada que investiga la causa para refrendar su testimonio. Si todos los testigos repiten su testimonio ante el juez, Kevin Cui se podría enfrentar a una condena de hasta 15 años de cárcel frente a los argumentos de su defensa que defienden unos hechos que no alcanzarían los cinco años de cárcel.
Temas:
- Conductor kamikaze