6 cosas en común de las parejas felices

Es común ver a parejas felices que se llevan maravillosamente después de toda una vida juntos. Y también es frecuente que las personas se pregunten cuál es su truco para vivir en completa armonía. La verdad es que no existen las relaciones ideales, sino la capacidad de la pareja de resolver los problemas de forma satisfactoria para ambos cónyuges. Todas estas relaciones positivas tienen cosas en común: una serie de hábitos saludables que fortalecen su amor día a día.

Los hábitos de las parejas felices

Se demuestran su cariño

Las relaciones saludables suelen tener gestos de cariño uno con el otro, y lo hacen de buen gusto. Él la sorprende con un desayuno en la cama, pues ella ha trabajado hasta tarde. Ella, lo llama para invitarlo a un concierto de un grupo que él adora, y ya ha comprado las entradas. Estos gestos de cariño fortalecen el amor.

Valoran a su cónyuge

Un hábito de las parejas felices es hacerse cumplidos sinceros. Es adorable estar en una cena y oír que uno de los cónyuges halaga a su pareja frente a todos, mientras sus ojos brillan de orgullo. Decirle a tu cónyuge que te atrae o que lo admiras, con frases como: “Qué bien te sienta ese peinado”, es un hábito de amor saludable.

Resuelven los conflictos en armonía

Es innegable que los problemas existen también en las relaciones felices, pero las parejas unidas saben cómo lidiar con estas situaciones. Generalmente, esto toma tiempo, pero es necesario ejercer la empatía y saber ponerse en los zapatos del cónyuge. Si ambos intentan comprender al otro, los conflictos son mucho más fáciles de resolver.

Se comunican con franqueza y honestidad

Las parejas felices tienen un distintivo esencial: tienen una buena comunicación. Y para tenerla, es necesario que ambos hablen francamente y expresen sus deseos y opiniones con total honestidad. Ni el hombre ni la mujer puede leer la mente del otro; para que haya comprensión debe haber un diálogo abierto y sincero.

Son justos y equitativos

Para que la unión se mantenga fuerte, en la pareja debe prevalecer la justicia. Si uno de los cónyuges siente que sus derechos no son respetados, las asperezas comenzarán a afectar el vínculo. Si él odia lavar los platos, puede ocuparse del lavado de la ropa. Lo esencial es compartir responsabilidades y trabajar como un equipo.

No pierden el romanticismo

La oxitocina, la «hormona del amor», se libera con el contacto físico. Y también genera sensaciones placenteras y emociones positivas, como la felicidad. Las parejas fuertes no pierden el hábito de abrazarse en cualquier momento. En la vida compartida, el romance refresca la pasión.

Sin duda, estos sanos hábitos de las parejas felices son el secreto para que una relación de amor perdure para siempre. ¿Qué habito de amor crees que es más importante?