Marlaska borra con ‘tipex’ a los inmigrantes ilegales
Fernando Grande-Marlaska debería saber a estas alturas que maquillar la realidad no resuelve los problemas. Resulta que el ministro del Interior ha encontrado un método mágico para solucionar el problema de la inmigración ilegal. Consiste en hacer desaparecer de un plumazo las avalanchas de inmigrantes ilegales para que cuadren mejor las cifras.
Así, por ejemplo, en el último Informe sobre ‘Inmigración irregular 2021’ la invasión de marroquíes a Ceuta del 17 y 18 de mayo no figura bajo la excusa de que el ministerio dice desconocer el número de inmigrantes ilegales que la cruzaron. Unos datos que, como desvela OKDIARIO, el Ministerio del Interior no incluye porque tres meses después no ha tenido tiempo de actualizarlos ya que los mismos «se encuentran bajo análisis y tratamiento». Si el ministro desconoce el dato, se lo facilitamos nosotros: fueron en torno a unos 10.000 marroquíes los que saltaron la valla fronteriza con Ceuta, aunque su ministerio rebajó la cifra de forma oficial a 8.000.
Ni siquiera los propios policías y guardias civiles que trabajaron sobre El Tarajal en aquellos días se creen que Interior no conozca la cifra exacta: todas las entradas fueron tramitadas días más tarde, cuando cesó el caos de los saltos. Todos los que entraron fueron identificados y tienen expedientes de expulsión en tramitación. Conociendo el prontuario de engaños de Marlaska en el caso de la destitución de Pérez de los Cobos o sus flagrantes mentiras con el traslado de inmigrantes de Canarias a la Península, cuesta creer que no estemos por enésima vez ante otro ejercicio suyo de burdo trilerismo.
La dura realidad que intenta borrar Marlaska a golpe de ‘tipex’ es que en un solo día entraron ilegalmente en España la mitad de los inmigrantes ilegales que entraron en los primeros cinco meses de 2021. Es un dato demoledor que demuestra que nuestras fronteras son auténticos coladeros gracias a la incompetencia de un ministro amortizado por los escándalos y que a estas alturas debería haber sido destituido. Desde los tiempos en que el socialista Jesús Caldera borraba con ‘tipex’ los parados que producía Zapatero en cantidades industriales que no veíamos nada semejante. Mal vamos si Marlaska pretende solucionar las invasiones de inmigrantes ilegales haciendo de cuenta que no existen. Trampas al solitario las justas, ministro.
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