El facturazo eléctrico, un chollo para el Gobierno

Mientras los españoles soportan a duras penas el crecimiento exponencial de la factura de la luz, Pedro Sánchez pide a los ciudadanos calma y se frota las manos. Pese a la rebaja al 10% del IVA, la recaudación por este impuesto se ha incrementado en más de 1.400 millones de euros. Cuánto más sube la factura, más se endosa Hacienda, porque sólo con los derechos de emisión de CO2 ha ganado 1.080 millones de euros hasta junio. Se trata de un recargo público a las eléctricas que las compañías trasladan por medio del precio al recibo de cada ciudadano y negocio. Quien contamina, paga, y quien recauda es el Estado. Un chollo para las arcas públicas. En sólo seis meses, más de mil millones de euros. Hagan las cuentas: a final de año, 2.000 millones de euros. Por contaminar, las eléctricas asumen un coste que, claró está, trasladan a los consumidores en la factura. Y al final, quien gana es Hacienda.

En el mercado, el derecho para emitir una tonelada de CO2 en 2017 costaba 5,83 euros; hace un año, su precio alcanzaba ya los 25 euros, y el pasado mes de abril, los 42 euros. Y Sánchez, entretanto, haciendo caja. El precio de la luz en el mercado mayorista ha seguido una tendencia de escalada en septiembre con un nuevo récord el pasado jueves de 140,23 euros por megavatio (MWh), lo que se traduce en un 217% más en comparación con el mismo día del año pasado. Es decir, triplica el precio que se pagaba hace tan solo 12 meses. Si les parece mucho, sepan que para los próximos meses los analistas auguran picos de hasta 200 euros/MWh, lo que supondrá cerca de un 45% más que en la actualidad.

La hipocresía del Ejecutivo socialcomunista cotiza al alza: mientras le pide paciencia a los ciudadanos, deja que vaya pasando el tiempo para ir recaudando cada vez más. Cuánto menos hagan, más gana. Porque no hacer nada es una fuente garantizada de ingresos extra. ¿Se acuerdan ustedes de aquello del ‘escudo social’?