Elisenda Paluzie cobra de ti, pero te detesta
La presidenta de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) es un odiadora profesional de España. Eso no es óbice para que sea catedrática de un cuerpo de funcionarios español y cobre su nómina rojigualda cada mes. Como tantos otros (¿qué hacen diputados separatistas en el Congreso?).
No viendo claro que revalidase la presidencia de la ANC, la funcionaria española preparaba el asalto al rectorado de la UB con el apoyo de Carles Puigdemont. Pero sí, fue reelegida, y ahora se le plantea un dilema ante unas votaciones previstas para noviembre. El rectorado es una tentación, pues está en la naturaleza del movimiento independentista controlar y asaltar las instituciones para mayor honra y gloria de su causa (además, esos cargos siempre están jugosamente remunerados).
Así que la tenemos desatada denunciando la supuesta dependencia de las universidades catalanas a la legislación española, origen de todos sus males.
Claro que Cataluña tiene, desde hace años, una Ley de Universidades (LUC), y vale la pena recordar que el gobierno catalán y las políticas de Mas-Colell tuvieron mucho que ver con los recortes en materia de financiación universitaria. ¿Cuál es la solución? Se deduce de su lamento omnipresente estos días: los rectorados de las dos universidades más importantes de Cataluña, la Universidad de Barcelona y la Universidad Autónoma de Barcelona, están en manos de “unionistas». Y hay que corregirlo irrumpiendo en la precampaña de las elecciones de la UB y moverle la silla a su actual rector, Joan Elias.
¡Pues menos mal que esos rectorados son “unionistas”! Que se lo digan a Àlex Serra de la plataforma constitucionalista S´ha acabat. No solamente les han llegado a agredir por montar carpas informativas, sino que pasó por un calvario por plantar cara a Jaume Munich, profesor de Derecho Internacional Público y, por extensión, al propio rectorado de la UAB, en manos de Margarita Arboix. Esa también demasiado “unionista” para Paluzie.
Para que se hagan una idea, este docente poco decente lleva años refiriéndose a España como «Estado fascista español» en sus clases. Cuenta Àlex Serra que, a principios de febrero, durante el primer día del curso, se dirigió a todos los alumnos para decir que Ciudadanos era un partido fascista y de extrema derecha y que sus votantes eran inútiles. Y avisó, con toda chulería, de que él se referiría a España como «Estado fascista español» y que, por mucho que “los subnormales de los fachas” lo dijesen, España no era una nación y Cataluña era una nación oprimida».
El joven Serra esperó al término de la clase para acercase a Munich y, en un aparte, le hizo saber que se había sentido ofendido. Y el separatista, lejos de mostrar comprensión o empatía, le respondió que él hablaba «en libertad». Al día siguiente, en plena clase, prevaliéndose de su posición de superioridad y de ser quien evalúa a los alumnos, le llamó “patético” y le acusó de tratar de censurarle. Al parecer estaba que trinaba porque, como consecuencia de unos escritos que envió el alumno, había tenido que retirar un lazo amarillo de su despacho. ¡Oh! Ningún órgano de la Universidad “unionista” se interesó como era debido por el grave incidente.
Pero esta gente tan demócrata y tan ‘Dinamarca del Sur’, vuelve a las andadas. El president Torra hará la vista gorda en plena pandemia del Covid. No habrá manifestación a lo grande pero sí diversos atropellos y escraches. La Universidad de Barcelona será la diana preferente de los ataques independentistas esta próxima Diada. La excusa de Paluzie es que el edificio es céntrico, lo que da “visibilidad a la acción”. Exactamente lo que leen. Lo oyó en RAC1 el periodista Joaquín Romero hoy mismo. Está en su Twitter.