Juegos Olímpicos de París

El COI adoctrina a la prensa con una guía ‘woke’: «No presuma la identidad de género de una persona»

El Comité Olímpico distribuye un documento de 33 páginas sobre cómo informar

La ceremonia de inauguración ha desatado feroces críticas en Francia

Aquí puedes consultar la guía 'woke' del Comité Olímpico Internacional

woke
Thomas Bach, presidente del COI.
Guillermo Sáez

El Comité Olímpico Internacional ha publicado una guía ‘woke’ para los periodistas que informan sobre los Juegos de París. Se trata de un documento de 33 páginas consagrado a cómo se debe informar sobre los deportistas bajo el prisma de la identidad de género y con el siguiente título: Directrices del COI para una representación igualitaria, justa e inclusiva en el deporte. Más leña al fuego después de la polémica ceremonia de inauguración que sigue levantando ampollas en Francia.

El texto está dividido en tres partes: El contexto. Reconocer y cambiar los estereotipos; La práctica. Adoptar prácticas de representación justa e igualitaria; y Pasar a la acción. Listas de comprobación para facilitar la práctica. Además, cuenta con un anexo: Deportistas transgénero y con variaciones de las características sexuales

«Las mujeres, al igual que los hombres, no son un grupo homogéneo, ni se definen únicamente por su identidad de género: entre ellas, las mujeres son tan distintas como lo son de los hombres (…) El periodismo deportivo se centra de manera desproporcionada en la faceta no deportiva de las mujeres (físico, ropa y vida íntima) y con frecuencia hace énfasis en su apariencia, que prevalece sobre su deportividad, rendimiento y capacidades», asegura el COI, el mismo organismo que, en el voley playa, pone a las mujeres a jugar con bikini y a los hombres, con camiseta y bañador hasta las rodillas.

En su argumentación, la guía subraya que «es posible reforzar la narrativa en torno al deporte femenino y las deportistas para mejorar la visibilidad y la exhaustividad de la cobertura, presentar nuevas figuras y llegar a nuevos públicos». «En términos de presentación del contenido, también es posible (y necesario) adoptar una perspectiva de género y aplicarla al tono, estilo, lenguaje, encuadre e imágenes», añade.

«¡Atención! No debería presumir la identidad de género de una persona. Consulte cómo se identifica y con qué pronombre desea que nos dirijamos a ella», reclama el Comité Olímpico Internacional, que incluye una numerosa lista de consejos en su guía, entre los que destacan los siguientes:

  • Uso de la forma masculina y femenina: Cuando haga referencia a personas precisas y cuyo género conoce, utilice el género que corresponda a su cargo, profesión, función u otras actividades. Con un determinante: el/la/elle, un/una/une, este/esta.
  • Desdoblamiento: Mencione de manera explícita también a las mujeres para evitar relegarlas a un segundo plano. Los deportistas y las deportistas, los y las atletas. Estimados presidentes, estimadas presidentas. Consejo: varíe el orden. Si recurre a la opción de la doble designación, varíe el orden para evitar colocar siempre el masculino en primer lugar. No obstante, tenga cuidado, pues en ciertos casos puede opacar el sentido del texto o generar confusión.
  • Cambie el género: Pruebe a cambiar el género de la persona a la que está haciendo referencia. Si algo le resulta chocante, es posible que su texto esconda un prejuicio.
  • No atribuya el éxito de una mujer a su entrenador o entorno («aquí está el hombre que lo hizo posible»). En el caso de los hombres, no se suele atribuir su éxito a su entrenador o entorno.
  • Términos que se deben evitar: «nacida hombre», «nacido mujer», «hombre biológico», «mujer biológica», «genéticamente masculino», «genéticamente femenina», «hombre a mujer», «mujer a hombre».
  • La categoría sexual de una persona no se asigna únicamente en función de su genética, y la biología de un individuo puede alterarse cuando se lleva a cabo atención médica de afirmación de género.
  • Una cobertura informativa respetuosa comienza con el uso de las palabras adecuadas. Recuerde que debe utilizar un lenguaje preciso e inclusivo, en particular el nombre, los pronombres y los términos adecuados, así como las imágenes apropiadas. Si es necesario, pregunte a la persona qué pronombres utiliza y cómo se identifica o describe, para respetar su autodeterminación.
  • No haga suposiciones ni especule sobre la identidad de género, sexualidad o características sexuales de una persona basándose en su aspecto, nombre u otros factores.

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