La abogada que acusó a la infanta se llevó en metálico dinero de las fianzas de Afinsa
La abogada Virginia López Negrete retiró dinero en efectivo de las cuentas de Manos Limpias donde estaban depositados los 109.000 euros correspondientes a las fianzas de los afectados de Afinsa. Los documentos de los movimientos bancarios del sindicato a los que ha tenido acceso OKDIARIO prueban que la letrada retiró 11.500 euros en cash en 2011 directamente de los depósitos de sus clientes.
En poco más tres meses hizo cinco retiradas en efectivo. Las cantidades ascendieron a 11.500 euros. Estos cobros se producían un año antes de que López Negrete, según su propia versión, cobrara sus honorarios de Manos Limpias por llevar el ‘caso Afinsa’. El afán de cobrar en efectivo de esta letrada lo plasmó también el ex secretario general de Manos Limpias, que declaró ante la fiscalía que entregó la mitad del dinero de las fianzas en metálico a López Negrete en 2011. «Ni talón ni transferencia», aclaró.
Esta serie de pagos en cash a la letrada hacen sospechar de la veracidad de sus cuentas. Miguel Bernad asegura que le pagó unos 51.000 euros en 2011, pero ella sólo presenta una factura, sin ninguna corroboración contable ajena, de que cobró la mitad y un año más tarde, pero entre medias ella misma retiró directamente dinero de la cuenta de Manos Limpias.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional, la UDEF y la propia Hacienda intentan aclarar por qué una letrada cobra directamente sus honorarios, si fuera el caso, de la cuenta de su cliente. Y obviamente esto lleva aparejada otra duda: si estos pagos en efectivo, sin factura conocida hasta el momento, fueron debidamente declarados a Hacienda o no. En cualquier caso, es una forma harto opaca para la letrada que acusó a Urdangarin de tejer una red para ocultar sus ingresos.
La desmemoria de la infanta Cristina parece tener su remedo en la declaración de López Negrete: «Esta parte debe poner en seria duda el hecho de que la autora de esos reintegros fuese mi representada, pues analizada de forma pormenorizada la documentación facilitada por el BBVA y unida a las actuaciones, se observa claramente como la mayoría de esos reintegros aparece una rúbrica (firma corta) que nada tiene que ver con la firma de mi representada, excepto en el reintegro efectuado el 18/01/11 por importe de 2.500 euros».
«Con ello», prosigue el alegato exculpatorio de López Negrete, «en absoluto se está negando de manera categórica la autoría de los reseñados reintegros, pero dado que se trata de reintegros de importes no elevados y que se corresponden con fechas que se remontan a hace ya más de cinco años, se hace altamente difícil y prácticamente imposible de recordar con cierta seguridad si realmente mi representada fue la persona que procedió a reintegrar las cantidades que se le están atribuyendo, máxime cuando no es su firma y no aparece tampoco adjunta su fotocopia del DNI, como sí en cambio aparece en cambio unida a reintegros atribuidos a Bernad».
En suma, esta letrada no recuerda si hizo cinco reintegros en efectivo, pero sí apunta que sólo hay pruebas contra Bernad de cobros dudosos. Tampoco explica en su alegato por qué debía cobrar en cash con cargo a la cuenta del cliente que ella controlaba.
López Negrete evita detallar a la justicia si el cliente (Manos Limpias) sabía que estaba retirando ese dinero de su cuenta. Admite un único cobro, 2.500 euros, pero pese a ser una cantidad pequeña tampoco explica tan extraño mecanismo de trasvase de dinero: lo retira porque está autorizada en la cuenta del sindicato. No hay otra explicación en el sumario de esta letrada, que se enfrenta a una doble acusación: apropiación indebida y extorsiones, incluido el BBVA, el banco que ha desnudado sus anómalos movimientos de dinero.