¡París es una fiesta! El Louvre se ilumina para el nuevo presidente de Francia al ritmo de la Marsellesa
El candidato moderado y a favor de la Unión Europea, Emmanuel Macron será el próximo presidente de la República francesa y en la Plaza del Louvre entre 10.000 y 15.000 personas, según la policía, no paran de gritar de alegría. La emblemática pirámide del Louvre se ha encendido de repente y las cuatro pantallas gigantes que hay colocadas en los extremos de la plaza muestran el logo de la candidatura de En Marche! con fotos de Macron acompañadas de la palabra: «Presidente».
París es una fiesta y el Louvre el epicentro de los conciertos y las celebraciones. La inmediaciones están desbordadas. Todos se mueren por entrar y bailar al son de los mejores cantantes franceses. La plaza se llena de banderas francesas, de Israel, de Palestina y de diferentes colectivos. «Allez» (¡Vamos!) «¡Todos unidos», gritan. El público se viene arriba cuando desde el escenario anuncian: «Atención, ¡Obama nos está viendo en estos momentos por la televisión. Demostrarle lo contentos que estáis!».
«Macron nos va a dar una Francia unida»
Después de una campaña intensa lo han conseguido su ‘ejército’ de fieles se merecía una fiesta por todo lo alto acompañados de todos los votantes y simpatizantes del candidato y el Louvre era el lugar perfecto. «No queríamos agobiarnos alquilando un lugar cerrado y que luego parte de la gente que se acercase no pudiera entrar por falta de espacio. El Louvre es el lugar perfecto. Un sitio neutral que no está vinculado ni a la izquierda ni a a derecha», señala un miembro de la candidatura de Macron.
«Esto ha sido un trabajo colectivo de muchos meses y estamos muy contentos porque necesitamos una Francia unida y es lo que nos va a dar Macron con su programa», explica Cristine, encargada de la candidatura para ayudar a los medios internacionales.
Una victoria esperada en París pero no en el norte y en la periferia de Francia donde han recaído los mayores apoyos para la candidata del Frente Nacional Marine Le Pen. En la Francia de Macron uno de cada tres electores no ha temido a la candidata del Frente Nacional.