El nuevo desafío de Macron: ganar las elecciones legislativas para poder gobernar

Francia
OKDIARIO se encuentra en Francia para cubrir las elecciones a la Presidencia del Elíseo. (Foto: Nuria Val)

El nuevo presidente de Francia Emmanuel Macron tiene todavía un obstáculo importante por superar si quiere sacar adelante el programa reformista que le catapultó con más del 66% de votos al Elíseo: ganar las próximas elecciones legislativas del 11 y el 18 de junio.

Macron y su hasta ahora plataforma ‘¡En Marche!’ evolucionan para preparar estos comicios. Unas elecciones fundamentales ya que el presidente se juega tener mayoría en el Parlamento para sacar adelante sus propuestas. De lo contrario se verá obligado a recabar apoyos pactando con las distintas fuerzas parlamentarias y no todas están por la labor.

De momento, Macron ya ha anunciado que no seguirá al frente de su nueva formación para centrarse en su labor como nuevo jefe del Ejecutivo francés abriendo la puerta a nuevos candidatos que quieran presentarse hasta este jueves. El movimiento, a su vez, se refunda a los pocos meses de vida y pasa a llamarse ‘La République En Marche’.

El primero que ha comunicado sus intenciones para ser el candidato del partido de Macron es el socialista Manuel Valls. El todavía presidente en poderes François Hollande prefirió aupar a Macron para el Elíseo en lugar de a su otro ‘ojito derecho’ como es Valls. Ahora el socialista se postula a este puesto con el considerable cabreo de los suyos que no han tardado en pronunciarse. El diputado Alexis Bachelay bromeó en Twitter diciendo: » Espero que Bruto y Judas no pidieran la presidencia de En Marche!».

La importancia de ganar estas elecciones

El partido de Macron está obligado a ganar en los distintos distritos de Francia porque el presidente se juega no poder aplicar el programa de Gobierno en los próximos cinco años. En la ‘jerga política’ los de Macron son llamados «paracaidistas» porque acaban de aterrizar en política con el nuevo partido y puede resultar un problema de cara a las legislativas.

El resto de formaciones mantienen a sus dirigentes en los respectivos distritos y algunos son considerados verdaderos «hombres fuertes» ya que se han ganado la confianza de los vecinos y potenciales votantes. Así, los partidos tradicionales parten con ventaja en estos comicios.

Además, a la formación de Macron también se le añade otro problema como es el financiero. Los partidos políticos reciben dinero de sus miembros pero, sobre todo, del Estado. Estos fondos públicos dependen en gran medida los resultados en estas elecciones parlamentarias. Así, las formaciones recibirán una primera parte de estos fondos en proporción al número de votos en la primera ronda por sus candidatos; y una segunda fracción basada en el número de parlamentarios que se declaran ser fijado, una vez elegido.

En la primera ronda, los candidatos que obtengan más del 50% de los votos en su circunscripción ganan directamente uno de los 577 escaños de la Asamblea. Para la segunda vuelta, la elección se hace entre los candidatos que hayan superado la barrera del 12,5% en la primera ronda. Según cómo quede la mayoría parlamentaria, Macron podría cambiar a su primer ministro o incluso al Gobierno. Todo depende de los apoyos que disponga.

Cuatro escenarios posibles

Los expertos vaticinan cuatro escenarios que podrían favorecer o no al presidente francés. También dependerá de los acuerdos posteriores.

Primer Escenario: Emmanuel Macron consigue la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional

Sería el escenario ideal para Macron que podría aprobar sin problemas las medidas regeneradoras que prometió a los franceses durante su campaña presidencial. Macron tendría así cinco años para reconstruir el país galo. Los ‘macronistas’ ya aseguran en los medios que cuentan con tener 577 candidatos en las mismas circunscripciones. «Pedimos a los franceses que nos dejen tener mayoría presidencial», señala Benjamin Griveaux, portavoz de la République En Marche.

La baza con la que juegan es el ‘ejército’ de ‘macronistas’ implantado recientemente en los distintos territorios gracias a la estrategia del ‘porte a porte’ (puerta a puerta) que publicó en exclusiva OKDIARIO.

Segundo escenario: gana la derecha y pacta con el Gobierno de Macron

La derecha y su nueva líder François Baroin no han perdido la esperanza de ganar las elecciones parlamentarias. Sin embargo, que ganase la oposición implicaría tener a un Gobierno con las manos atadas y sería el primer caso en la historia de la Quinta República.

La derecha ha tenido estas semanas para entonar el ‘mea culpa’ tras los numerosos casos de corrupción que han hundido incluso a su candidato François Fillon. Los primeros sondeos aseguran que la derecha en Francia tardará en recuperarse y no será en estos comicios de junio cuando arrase. Los ciudadanos están muy decepcionados y se demuestra en las numerosas encuestas realizadas: un estudio reciente de Kantar Sofres volvería a dar la victoria a los de Macron con el 26% de los votos frente a los republicanos (22%), el Frente Nacional (21-22%), la Francia rebelde de Melenchon (13% -15%) y el partido socialista (8-9% ).

Tercer escenario: Macron no consigue mayoría absoluta y tiene que pactar con la derecha y los socialistas

Uno de los escenario más probables por el momento, según diferentes analistas franceses, es que Macron no consiga la mayoría absoluta que le proporcione un Gobierno holgado como así lo hizo en España el Partido Popular de Mariano Rajoy en su primera etapa de Gobierno. Para aprobar las numerosas propuestas, Rajoy no necesitó pactar con nadie ya que su propio grupo en el Congreso le otorgaba la mayoría necesaria para que salieran adelante.

Un planteamiento que en este escenario no cabría y armándose de valor como el actual presidente de España, Macron deberá de ensayar sus dotes de buen negociador para atenerse a pactar con los socialistas y la derecha francesa si quiere sacar sus medidas adelante en la Asamblea Nacional. La encuesta realizada por ‘Opinión 3’ en Francia estima que el partido de Macron obtendría entre 249 y 286 el número de asientos frente a los (200 a 210 para LR y la UDI 28-43 PS, de 15 a 25 y el FN 6 a 8 de la parte frontal izquierda).

La primera solución que tendría Macron sería la de construir una coalición de mayoría de diputados de izquierda y derecha, los más numerosos hasta el momento en la Cámara. En este caso, Macron lideraría una parte mientras que el jefe de la oposición podría hacerse cargo de la otra. Otra solución podría darse en buscar mayorías que fluctúen para aprobar determinadas medidas con el apoyo de unos y otras con el resto de fuerzas. A esta estrategia también se ha sumado Rajoy en el Congreso y la necesidad de aprobar con urgencia, por ejemplo, los Presupuestos Generales del Estado de 2017. El jefe del Ejecutivo español busca mayorías en las distintas fuerzas de manera que se puedan aprobar las cuentas públicas.

Esta es la línea que parece defender la derecha con el diputado Jean-Pierre Raffarin al frente. Lo llaman «parlamentarismo constructivo» y permite avanzar en numerosas medidas como el ‘pacto contra el terrorismo’, entre otros ejemplos.

Cuarto escenario: un Parlamento ingobernable

Este último escenario es el que nadie piensa pero sería totalmente factible que se pudiera dar. Un voto dispar con muchos fuerzas y una Asamblea Nacional fragmentada viendo los primeros resultados de las elecciones presidenciales. Se trataría de compartir el ‘pastel’ entre las distintas fuerzas y cada una votase las iniciativas según su conveniencia, lo que implicaría desconocer el resultado hasta su votación y una política descontrolada.

En este caso, la popularidad de Macron bajaría considerablemente dependiendo de los debates acalorados y las respectivas propuestas acordadas. Un escenario que requiere mucha diplomacia y prometer cosas que muchas veces serán impopulares de cara a la ciudadanía. Muchos analistas advierten de que si se da este caso, Macron podría volver a convocar elecciones en menos de cinco años.

Sin ninguna certeza hasta el momento, los partidos comienzan de nuevo sus estrategias para afrontar la inmediata campaña que culminará en dos rondas de votaciones: el 11 y el 28 de junio.

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