Gabriel Attal renuncia como primer ministro de Francia tras las elecciones
El líder del ejecutivo francés presentará mañana su dimisión, pero se ofrece a dirigir un Gobierno provisional ante la cercanía de los Juegos Olímpicos
El primer ministro de Francia, Gabriel Attal, ha anunciado este domingo, tras conocerse los primeros sondeos de las elecciones legislativas, que mañana presentará su dimisión. Sin embargo, y a pesar de que su partido, Juntos, ha pasado a ser la segunda fuerza en la Asamblea Nacional, Attal se ha mostrado dispuesto a dirigir el ejecutivo de forma provisional. Especialmente ante la situación de bloqueo parlamentario y por la cercanía de los Juegos Olímpicos.
«Nuestro país afronta una situación política sin precedentes y se prepara a acoger al mundo en algunas semanas», ha dicho Attal en referencia a los Juegos de París que arrancan el próximo día 26. «Por tanto, asumiré evidentemente mis funciones todo el tiempo que el deber me lo exija», ha añadido Attal en una declaración oficial tras conocerse los primeros sondeos al cierre de las urnas. El bloque del presidente, Emmanuel Macron, ha quedado en segundo lugar, con una proyección de entre 150 y 180 asientos en la nueva Asamblea. El Nuevo Frente Popular, la gran coalición de izquierdas, ocupa la primera posición. El partido Reagrupamiento Nacional, de Marine Le Pen, se convierte en la tercera fuerza.
Attal ha pedido «responsabilidad» a los grupos políticos porque en el nuevo mapa «los extremos no pueden impulsar una mayoría absoluta» en la Asamblea. El aún primer ministro ha asegurado que estas elecciones han evitado los tres grandes peligros que, según él, acechaban al país: una mayoría de la derecha, una mayoría del NFP con un fuerte influjo de la extrema izquierda y la liquidación de movimiento político macronista.
La Asamblea Nacional francesa tendrá como principal fuerza al NFP, la gran alianza de izquierda formada por Jean-Luc Mélenchon, líder de la radical Francia insumisa, junto a los socialistas, comunistas y ecologistas. Las primeras previsiones dan a la coalición entre 180 y 215 asientos en la Asamblea, lejos de los 289 escaños que marcan la mayoría absoluta. RN, el partido de Marine Le Pen, se posiciona como tercera fuerza, con una previsión de entre 120 y 150 escaños.