Obama da por amortizado a su antiguo socio Biden y se vuelca con Kamala Harris
Barack Obama tuvo que pedir perdón a Kamala Harris por definirla como "una fiscal de muy buen ver"
¿Quién dirige el país y el Partido Demócrata? El ex presidente de Estados Unidos Barack Obama ha pasado el bastón de mando real a la vicepresidenta Kamala Harris, candidata del Partido Demócrata, a través de su discurso de este martes en la Convención Nacional Demócrata en Chicago (Illinois), madrugada ya del miércoles en España, después de forzar la salida del presidente Joe Biden de la carrera presidencial, debido a su desastroso debate en el que se pusieron de manifiesto sus problemas mentales y cognitivos. Obama da así por amortizado a su antiguo socio Biden y se vuelca con Kamala Harris en una intervención, en la que no ha sido capaz de entusiasmar a la gente, debido a que no cumplió sus promesas de campaña de 2008 y 2012.
Obama sí demostró que sigue siendo una estrella dentro de su partido, aunque fue eclipsado por su mujer Michelle Obama. El demócrata ofreció su viejo discurso de siempre, algo modificado: en vez de decir «sí, se puede», dijo «sí, ella puede», en referencia a Harris. La intervención de Obama fue además muy larga. En cambio, pronunció un mensaje sencillo, basado en su época de activista en Chicago.
Barack Obama utilizó las viejas palabras de su campaña de 2008, convertidas en emblemáticas que pronunció una voluntaria en Iowa aquel año: «Me siento entusiasmado. Estamos listos», quiso recordar Obama al comienzo de su alocución, en la que ha estado trabajando durante los últimos tres meses. Sin embargo, tuvo que cambiar parte de su contenido después de forzar la salida de Biden, ya que estaba preparada para el presidente. Obama también recuperó sus líneas de siempre: «No abucheéis, votad», dijo los votantes cuando empezaron a gritar contra Donald Trump.
Más de 20 años después de pronunciar su primer gran discurso en Boston (Massachussetts) en la Convención Demócrata de las elecciones de 2004, que perdió el candidato demócrata John Kerry contra el republicano George W. Bush, Obama volvió a recuperar sus mensajes de esperanza y un futuro mejor con unas palabras que no han envejecido bien, debido a que fue no cumplió sus promesas de campaña durante sus dos legislaturas. Mientras, en algunas ocasiones, no conculyó con algunas de las políticas que criticó a George W. Bush, como por ejemplo no pudo poner fin a la guerra de Afganistán, no pudo cerrar Guantánamo o amplió las leyes que otorgan más margen a las agencias de seguridad cuando luchan contra el terrorismo.
El martes, sólo hubo dos menciones a Joe Biden durante las intervenciones: fueron de Barack Obama. Tuvo palabras para Joe Biden al principio de su intervención, el cual no hizo un mejor discurso que su esposa Michelle Obama. Incluso, algunos delegados abandonaron la convención antes de que el ex presidente terminara su alocución. En cambio, a nadie escapó que Biden no estuviera presente durante su discurso y Kamala Harris estuviera en Wisconsin. Obama y Biden no se hablan. El Comité Nacional Demócrata prefirió que Obama no fuese visto con Kamala Harris este martes para no complicar la relación con la Casa Blanca, debido a que Biden se ha comprometido a hacer campaña para conseguir el voto de padres de familia de clase media trabajadora, a los que les importa la economía y nos las visiones de Harris para Estados Unidos.
El ex presidente Barack Obama describió los peligros que considera que se avecinan con una segunda presidencia de Trump, al tiempo que se burló de él con un lenguaje ofensivo: «Tiene una loca obsesión con el tamaño de las multitudes», indicó Obama, haciendo un gesto notablemente sugestivo, separando y luego juntando sus manos, y mirándolas brevemente hacia abajo. Obama atacó a Trump por sus posturas en inmigración, al que llamó egoísta: «Donald Trump no ve en el poder más que un medio para sus fines».
Con su apoyo a Kamala Harris, Obama puede dar continuidad a sus políticas e influencia en Estados Unidos, después de que el Partido Demócrata le haya dado la espalda a Joe Biden. El martes, se marcaron en rojo dos discursos: los de los Obama. Primero intervino Michelle Obama, sobre la que se especuló que podría convertirse en candidata después de que Obama reconociera que había que buscar un candidato excelente, y después el ex presidente.
Durante su intervención, Michelle Obama destacó que «la esperanza está volviendo». «Vamos a seguir moviendo nuestro país hacia adelante», resaltó la ex primera dama con unas palabras similares a las que pronunció en la Convención Nacional Demócrata de 2012 en Carolina del Norte, cuando su marido Barack Obama se presentó a las elecciones por segunda vez.
Así, el ex presidente Barack Obama pronunció el discurso clave del segundo día de Convención Nacional Demócrata en su ciudad, Chicago (Illinois), donde comenzó su carrera política, tras convertirse en el líder de referencia de su partido tras deshacerse del presidente
Obama: «Una fiscal de muy buen ver»
Obama tuvo que llamar por teléfono a Kamala Harris por decir hace años que era «una fiscal de muy buen ver», mientras elogiaba su trabajo. Kamala Harris conoce a Obama desde hace décadas. Ya en 2007 empezó a trabajar como voluntaria en la campaña del entonces senador de Illinois, que le llevó en 2008 a la Casa Blanca. Obama y Kamala Harris se han unido en los últimos días contra Joe Biden después del desastroso debate del 27 de junio contra el ex presidente de Estados Unidos Donald Trump, candidato republicano. Obama llamó por teléfono a Biden días antes de que anunciara su renuncia para amenazarle si no se retiraba con invocar una enmienda, que le hubiera incapacitado como presidente. Obama ha puesto a disposición de Kamala Harris a su antiguo equipo de asesores para que le ayuden a pulir sus discursos y sus políticas para llamar la atención de los votantes moderados e independientes de los estados indecisos (swing states), que tienen la clave para ganar la Casa Blanca. Obama ha visto en Kamala Harris una continuación de terminar con sus políticas en inmigración, economía o sanidad.
Obama y Biden no se hablan
Biden no ha estado este martes en Chicago en la Convención Nacional Demócrata. Se ha ido de vacaciones a California. Por ello, no ha escuchado el discurso de Barack Obama. Tampoco Obama estuvo el lunes en la convención. Joe Biden tuvo palabras para él sin mencionarle de forma directa durante su discurso, en el que se le saltaron las lágrimas, y se retrasó durante más de una hora, después de que los demócratas le sacaran del horario de máxima audiencia: «No os guardo rencor», dijo Biden a todos los líderes de su partido, que han forzado su renuncia a la carrera presidencial por miedo a perder las donaciones y 20 asientos en el Congreso.
Ahí había varios de sus enemigos: Nancy Pelosi, la ex portavoz demócrata de la Cámara de Representantes, que presionó hasta el final para que Biden abandonase. Hillary Clinton, a la que Obama apoyó en contra de Biden para que fuera la candidata demócrata en 2016, la cual perdió contra Donald Trump. La propia Kamala Harris, que se alió con Obama para que el ex presidente amenazara a Biden con invocar una enmienda que le incapacitase si no abandonaba tars el desastroso debate contra Donald Trump.