Los pasos para cuidar el boj si la tienes en el jardín

Si nos referimos al Buxus sempervirens es probable que no sepas de qué estamos hablando. Pero si luego explicamos que se trata de una especie también conocida como boj, o boj común, entonces seguramente más de uno tendrá una idea acerca de ella. Perteneciente a la familia Buxaceae, originaria de Europa, esta planta es una de las tendencias actuales en decoración de casa.

Los ejemplares de boj pueden verse en buena parte del viejo continente, y en España abundan en la zona septentrional del país. Más que nada cerca de los Pirineos, hacia el norte, esta especie forma parte del paisaje y ha sido adoptada por los vecinos locales.

¿Por qué se llama así y qué características tiene?

La denominación de boj se origina por sus frutos verdes. Esta especie de bolitas, si se rompen al medio, tienen unas pequeñas semillas que para muchos se parecen al rostro de un búho. Y de ahí que se use el nombre en latín para estos animales: «boj».

El boj común crece sin dificultades en casi toda la península ibérica, como un arbusto de desarrollo lento pero de altura respetable. Los ejemplares grandes pueden crecer unos 30 ó 40 centímetros de altura cada año, alcanzando hasta tres metros en su adultez. Cuando consiguen esas alturas es porque tienen al menos un par de décadas de vida. Y pueden sobrevivir unos 500 ó 600 años.

Es apreciado en el mundo de la decoración por su floración que aparece entre el final del invierno y el inicio de la primavera. Luego, los primeros frutos maduran a principios del verano. No debe confundirse con su variante pequeña, el Buxus suffruticosa.

Principales cuidados del boj común

Luz y temperatura

Aunque es una planta que tolera los rayos solares, éstos pueden ser contraproducentes si el objetivo es que crezcan en poco tiempo. Conviene, por tanto, dejarlo en un punto de semi sombra, y que en todo caso reciban el sol indirectamente. En cuanto al frío, resisten muy bien las temperaturas heladas. Y tampoco el calor es un problema. En general, son aptos para todo clima.

Riego

La humedad es clave para el bienestar de esta especie, así que procura regarlo abundantemente con agua de lluvia. Otro truco interesante es colocar una capa de mulch o mantillo sobre la superficie de la tierra para que no se resquebraje de forma rápida.

Suelo y abono

No es una planta demasiado exigente en cuanto a la clase de suelo en la que se localiza. Sin embargo, lo ideal es proporcionarle suelos neutros o calizos que drenen de modo fluido. El encharcamiento es tan perjudicial como la sequedad para esta especie.

Cultivo y poda

Si vas a encargarte de sembrarlo, tienes que hacer un hoyo en una maceta o en el jardín, echando abono y sustrato universal en él. Esto facilitará el enraizamiento de las raíces. Cultiva el cepellón del boj y tapa con tierra. Sé generoso. Un detalle es que nuestras mascotas querrán orinar sobre el cepellón. Asegúrate de que tus gatos y perros dejen que la planta pueda desarrollarse en paz. Utiliza algún repelente, de los que venden en las tiendas, para mantenerlos alejados de lo que será tu nuevo ejemplar de boj.

Para la poda, usa una tijera y deshazte de las ramas que se salen de su estructura. En primavera estimularás su crecimiento, mientras que en otoño le darás el tamaño que te parezca adecuado para que luzca durante el invierno. Depende de tus gustos.

Con todas estas recomendaciones, más algún que otro consejo de tu jardinero de confianza, tendrás unos bojs muy bonitos en casa. Sugerimos ponerlos en un lugar en el que estén visibles. Tienen la cualidad de mejorar el aspecto de los sitios que les toca ocupar.