Cómo hacer hormigón celular casero

Material compuesto: usos y características
usos y características

El hormigón celular casero es un tipo de hormigón bastante más fino y moldeable al cemento que todos conocemos y aunque se elabora con una serie de ingredientes muy concretos nosotros podemos hacerlo en casa si sigues la guía de pasos a continuación. Veamos cómo hacer hormigón celular casero.

Qué es el hormigón celular

El hormigón celular también llamado concreto celular es un tipo de cemento que aunque os suene algo raro se utiliza en infinidad de proyectos hogareños, grandes y pequeños ya sea en la construcción así como para realizar todo tipo de esculturas. Este tipo de hormigón es resistente al fuego y aislante de modo que resulta un un producto versátil que puede ser decorativo o beneficioso para un proyecto de construcción.

El hormigón celular está formado por un agente espumante y un mortero típico. Originalmente, era un tipo de hormigón que se utilizó originalmente como aislamiento en la década de 1920. El material fue llevado a proyectos de construcción de viviendas en los años 80, donde se utilizó como una alternativa barata para pasillos y paredes. También se descubrió que era fácil de manipular y formar moldes que eran poco costosos de fabricar y lo suficientemente livianos como para moverse. Tiene los beneficios de ser ligero y fácil de aplicar para la construcción y contiene menos productos químicos. Por todo esto, podemos intentar hacer en casa este tipo de hormigón celular y para ello, nada cómo seguir esta guía de pasos.

Pasos para hacer hormigón celular casero

La mezcla de hormigón celular está hecha de arena fina, cemento, agua y espuma estabilizadora. Una receta estándar puede ser 2 partes de cemento y arena fina y seca en 1 parte de agua y generador de espuma. Es mejor tener un generador de espuma de calidad para obtener los mejores resultados. Los agentes espumantes comerciales a menudo se basan en detergentes, por lo que si no encuentras la espuma deseada puedes utilizar un detergente para platos. Diluye el detergente echando 2 tazas de detergente en 18 litros de agua.

Pasos

  1. Mezcla bien los ingredientes secos antes de agregar el agua en pequeñas cantidades.
  2. Una vez que el agua está imbuida en la mezcla, agrega el generador de espuma o detergente.
  3. Mezcla tod bien antes de pesarlo para asegurarte de tener una mezcla sólida. Una báscula de cocina grande puede evaluar fácilmente el peso de tu espuma, que debe pesar aproximadamente unos 0.08 kilos onzas por cada cuatro litros.

Una vez hayas pesado el hormigón y logrado su textura algo más suave a la del cemento ya habrás hecho tu hormigón celular casero pero recuerda que siempre debes utilizar gafas protectoras y guantes adecuados cuando maneje los ingredientes mencionados. Además unos pantalones largos y una camisa de manga larga evitará que el pegajoso mortero se adhiera a tu piel.

Lo último en ¿Cómo se hace?

Últimas noticias