Cómo adiestrar a un perro adulto

¿Tienes un perro adulto pero no sabes cómo lograr que te haga caso? Aunque siempre es aconsejable adiestrar al perro desde cachorro, puede que hayas adoptado un perro que ya tiene algunos años de modo que vamos a guiarte a continuación, paso a paso, para que sepas Cómo adiestrar a un perro de forma correcta.

El adiestramiento canino de la mano de un experto o profesional es siempre garantía de éxito, pero también nosotros podemos poner en práctica varias pautas con las que lograr entrenar a nuestro perro sin que necesariamente sea un cachorro. El objetivo principal en el adiestramiento canino cuando el perro es ya adulto suele centrarse en una conducta que queremos corregir, como que ladre o que tire demasiado cuando lo paseemos. Veamos entonces cómo proceder.

Pasos para adiestrar a un perro adulto

1. El entrenamiento o adiestramiento de un perro adulto no debe verse como un aspecto negativo, sino como un regalo del amo para asegurar que el animal pueda integrarse más fácilmente en la familia y la sociedad. Antes de comenzar con la fase de entrenamiento, es bueno conocer a tu animal: su ritmo , su carácter y sus ritmos .
2. La comunicación amo y perro es clave para que el adiestramiento sea un éxito. Primero de todo ¿responde tu perro cuando le llamas por su nombre? Lo más seguro es que sí, pero si no lo hace tienes que comenzar por este paso. Debes llamarlo siempre y solo con su nombre, cuando tengas su atención. Si lo llamas y viene a dónde estás puedes darle un premio.
3. Evita elevar el tono de tu voz, puedes asustarlo o agitarlo, pero no olvides enseñarle el significado de la palabra «no».
4. Tendrás que entender que el «no» debe estar está asociado con algo que no debe hacerse, de modo que cuando el perro haga algo que no está bien debe ser suficiente para decir «no» y con el tiempo entenderá por sí mismo que esa palabra específica significa que debe dejar de hacer lo que está haciendo.
5. También comprueba si el perro se sienta cuando se lo dices. Este es uno de los actos de sumisión de los perros que te permitirá hacerle entender que debe obedecerte. Para lograr que se siente cuando se lo pides, si nunca lo ha hecho, debes usar comida que le guste y hacerle el gesto con la mano. El premio debe estar a la altura del hocico y cuando se siente, se lo tienes que dar.
6. Cada vez que el animal te obedezca, tienes que abrazarlo y recompensarlo (soltando el premio en su boca) para que entienda que hizo lo correcto. De esta manera el perro comenzará a entender qué obedecer y de qué manera.
7. Los perros adultos suelen tener conductas y hábitos propios adquiridos a lo largo de los años, por lo que un buen educador tendrá que poder cambiarlos, incluso si esto es realmente difícil, especialmente al principio. Lo primero que debe hacer es ganar confianza y crear un clima muy tranquilo y pacífico alrededor del perro.
8. Los primeros días de entrenamiento es importante no poner mucha presión sobre el animal, para acomodarse y comenzar a entender cómo comportarse.
9. En este punto podemos comenzar con la fase actual de entrenamiento. En general, comenzamos con órdenes elementales y, sobre todo, sencillas de comprender y memorizar, como: «quieto», «sentado», cuando comience a comprender estas órdenes, comienza a pasar a ejercicios más complejos.
10. Inicialmente, el perro podría demostrar verdaderas dificultades para obedecer, porque como adulto ya tiene viejos hábitos que olvidar antes de responder a los nuevos, pero con el tiempo y la paciencia necesarios, el perro comenzará a responder a los estímulos.
11. Una vez que haya comprendido cuál es el mecanismo a seguir en las órdenes, el perro, aunque sea adulto, te obedecerá sin ningún problema y podrás continuar gradualmente con las otras enseñanzas. Una de las mejores formas de educación para tu perro es hacer una solicitud que luego será recompensada.
12. En el momento en que sea obediente, debe ser recompensado con comida o con formas de afecto tal y como hemos mencionado. Para que una vez que entienda el mecanismo, el perro intente hacer la acción correcta porque recordará que a cambio tendrá un premio. De lo contrario, tendrá que aprender que si no obedece no tendrá el premio.
13. Cuando la fase de entrenamiento está dirigida a corregir algo que el perro suele hacer, pero en realidad no debería hacerlo, entonces ignóralo cuando haga esto y no lo recompenses. De esta manera, con el tiempo, ¡se olvidará de comportarse de esa manera particular!
14. Es bueno saber por último que no hay reglas precisas para la educación de un perro adulto, ya que cada uno de ellos tiene sus propios hábitos, una herencia genética, su propio carácter y, finalmente, su propia personalidad. De modo que has de tener paciencia y sobre todo ser insistente con el trabajo a realizar.