El sector turístico andaluz apuesta por priorizar el turismo de calidad

La jornada ‘Presente y futuro del sector turístico en Andalucía’ también ha contado con una mesa redonda, moderada por la presidenta no ejecutiva de OKDIARIO, Pilar R. Losantos, en la que representantes del sector turístico en Sevilla han analizado al detalle el momento dulce que atraviesa el turismo en la región.

Jorge González Sánchez, director del hotel Querencia de Sevilla, del Hotel AC Palacio y del Hotel Larios de Málaga; Javier Fernández Vera, propietario del Restaurante Los Baltazares, Juanlu Fernández, copropietario y gerente del Restaurante Cañabota, y Milagros López Ezequiel, la primera mujer conductora de coche de caballos de Sevilla, coinciden en que el tipo de turista que visita la ciudad ha cambiado: ahora es un turista que prioriza la calidad del viaje, que sabe exactamente lo que busca, y que gasta más, tanto en alojamientos, como en gastronomía y ocio.

La necesidad de regular los alojamientos turísticos

Andalucía ha superado este año las cifras de 2019 y recibe cada vez más turistas internacionales, que gastan en consecuencia. Sin embargo, desde el sector hotelero, critican la competencia desleal que supone para ellos la aparición de los pisos turísticos. «Las reglas del juego no son las mismas para todos, es necesario regular el mercado para que todos juguemos con las mismas cartas», ha reclamado Jorge González Sánchez, director de tres hoteles en Sevilla y Málaga.

«Ambas modalidades pueden coexistir. Es lógico que las familias, por ejemplo, elijan un alojamiento turístico por encima de un hotel. Este tipo de alojamiento da respuesta a una necesidad, pero no tiene por qué ser sinónimo de lowcost», ha incidido González Sánchez, defendiendo la necesidad de que el turismo sea de calidad y no de cantidad.

«No creo que exista realmente lo que llaman turismofobia. Nadie puede estar en contra del turista porque todos los sectores facturan de manera indirecta gracias a ellos, pero tenemos que empezar a potenciar el turismo de calidad», ha reclamado el director del hotel Querencia de Sevilla, recordando que grandes eventos como los Latin Grammy que acaba de acoger la ciudad, los ha colocado en el mapa y ha marcado el camino a seguir.

La gastronomía como foco de atracción turística

Aunque siempre lo ha sido, la gastronomía se ha convertido en uno de los puntos fuertes de Andalucía en los últimos años. Prueba de ello son las tres estrellas Michelin que ha recibido Jaén esta semana y que colocan a la región como potencia gastronómica. «Hay gente que viene expresamente para ir a nuestro restaurante y hacen noche en Sevilla. La gastronomía es una pieza fundamental para el turismo, y permite que podamos vender una Sevilla moderna, distinta y cosmopolita», ha defendido Juanlu Fernández, copropietario y gerente del Restaurante Cañabota, situado en la capital hispalense.

«Los hosteleros hemos puesto nuestro granito de arena. Hace años el 70% del cliente era local y ahora es al revés, hemos conseguido que los turistas elijan la ciudad en la que van a quedarse dependiendo de la oferta gastronómica que tenga. La apuesta por una gastronomía de nivel, atrae turismo de calidad con alto poder adquisitivo», ha recordado Fernández, incidiendo a su vez en la necesidad de «ir evolucionando, pero recordando siempre las raíces y sabores tradicionales de nuestra tierra»

En esta misma línea, Javier Fernández Vera, propietario del Restaurante Los Baltazares, situado en el municipio sevillano de Dos Hermanas, ha reiterado la necesidad de «no perder la esencia e identidad de Andalucía» y de seguir trabajando para que, «con nuevos parámetros y argumentos, la peculiaridad del producto andaluz siga estando presente».

La tradición que no debe perderse

Milagros López Ezequiel, la primera mujer conductora de coche de caballos en Sevilla, tuvo que luchar contra los estereotipos y el machismo del sector, pero lleva a gala el orgullo por el turismo del que se nutre la ciudad y, sobre todo, su gremio. La conductora ha aprovechado, además, para defender el sector y reclamar a las instituciones más protección contra los ataques «incesantes» de los ecologistas.

«Nuestros caballos están perfectamente cuidados: los turnamos para que puedan descansar, tenemos veterinarios, los alimentamos perfectamente y cuando el animal no está para trabajar, nos duele más que a nadie», ha defendido López Ezequiel, criticando a su vez que «se esté dando más ventaja a una minoría que quiere prohibir los coches de caballos, que a la gran mayoría que los disfruta y los trabaja». «Si no nos ayudan, vamos a desaparecer», ha concluido.