Urkullu abre una vía interna en el PNV para pactar con Feijóo frente al veto de Ortuzar
Núñez Feijóo e Iñigo Urkullu mantienen una relación de íntima amistad
Feijóo no se da por vencido tras el rechazo del PNV y «seguirá trabajando» para lograr su investidura
El PNV comunica a Feijóo que no negociará su investidura: «Para esta operación necesita a Vox»
El rechazo a la investidura de Alberto Núñez Feijóo no es una postura monolítica en el PNV. El lehendakari, Iñigo Urkullu, sin poder orgánico en el partido, ha abierto una vía de debate interno en favor del entendimiento con Feijóo frente a la posición oficial de Andoni Ortuzar, presidente del Euskadi Buru Batzar (comité ejecutivo del partido) de vetar la investidura de un presidente que tenga a Vox en la ecuación.
La buena relación entre el líder del PP y el presidente del Gobierno vasco es imprescindible para entender los movimientos que se están produciendo. Como también lo es la regeneración orgánica que está experimentando el PNV, con la renovación de cargos pendiente para dentro de unos meses. De hecho, algunos de los dirigentes que ven con buenos ojos la postura de Urkullu son los representantes de una nueva generación de políticos.
En el Euskadi Buru Batzar, cada día hay mayor debate sobre qué hacer. El lehendakari Urkullu, sin peso orgánico en la formación, suma voces a favor de negociar con el PP. Pero Ortuzar, que ha labrado una buena relación con Pedro Sánchez en estos cinco años de acuerdos y que apenas conoce al dirigente del PP, sigue rechazando apoyar la investidura de Feijóo por la presencia de Vox en la ecuación. En los próximos días está previsto que el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, tenga el primer contacto con un Feijóo al que no conoce personalmente.
Los motivos
Uno de los motivos que esgrimen para no cerrar la puerta al PP, es el retroceso electoral sufrido en las últimas contiendas electorales. Su potencial rival y con quienes se disputarán el futuro gobierno vasco, EH Bildu, está cosechando más frutos que los de Urkullu y Ortuzar de sus acuerdos con el PSOE. Y para algunos dirigentes consultados por OKDIARIO, esto es un signo de que «ya no podemos seguir apoyando a Sánchez». «Él», en referencia al candidato socialista, «ha elegido a sus socios a largo plazo y tiene más predilección a pactar con Bildu que con nosotros». «A nosotros sólo se acerca cuando no tiene otra opción», rematan estas fuentes.
Esas críticas por haber ayudado a inflar a Bildu durante el mandato de Sánchez no son nuevas. Son un aviso que los peneuvistas venían dando ya en los últimos meses, pese a que en ningún momento ha corrido riesgo alguno la coalición con los socialistas en el Gobierno Vasco. Pero en Sabin Etxea, la sede del PNV, ha sentado especialmente mal que el PSOE permitiera a los abertzales apuntarse el tanto de algunas concesiones conseguidas en las distintas negociaciones parlamentarias.
El PSE mira hacia Bildu
«Es incomprensible», aseguran, «teniendo en cuenta que al PSE también les debería interesar sacar rédito político de estar en el gobierno». Pero la dirección del PSE que pactó con Urkullu no es la misma que la de ahora. Y Eneko Andueza, actual líder, «mira más hacia Bildu de cara al próximo gobierno vasco» que su antecesora y vicelehendakaria, Idoia Mendia, creen en el PNV.
Además de esas tensiones y rivalidades con Bildu, que aumentan a un año de las elecciones autonómicas vascas, hay más razones tras la división en el Euskadi Buru Batzar. La segunda en orden de importancia es la sensación de que el PNV se ha movido hacia la izquierda. «No somos de izquierdas ni progresistas por muchos que algunos se empeñen en insistir en eso», relatan las fuentes consultadas.
En opinión de otra dirigente, «la percepción de nuestro votante más conservador de habernos arrimado tanto al PSOE estos años nos está perjudicando mucho». Por lo que, opina, «es necesario cambiar de forma urgente nuestra posición o dejaremos de ocupar la centralidad que ocupábamos hasta ahora».
Elecciones vascas
La reedición del actual acuerdo entre el PNV y el PSE para seguir gobernando el País Vasco cuatro años más parece cada vez más imposible por la actitud del nuevo líder de los socialistas vascos, más cercano a Bildu. El PNV, pues, en caso de lograr un resultado similar al que consiguieron en 2020 podría llegar a sumar con el PP para retener la Lehendekaritza. Entonces peneuvistas y populares sumaron 37 diputados, los mismos que la suma entre Bildu, PSE y Podemos que ahora podría hacerse con el poder.
Negociaciones
El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, más cercano a Ortuzar que a Urkullu respecto a cómo deben abordar la investidura de Feijóo, ya señalaba este martes antes de conocer la decisión de Felipe VI de proponer al líder popular que la negociación de los distintos socios con el PSOE no iba a ser nada fácil, ya que «tenemos nuestras propias rivalidades y divergencias ideológicas». Algo que repitió este miércoles en un vídeo grabado. En campaña, Esteban llegó a acusar a Bildu y ERC de «anteponer su agenda ideológica a la del autogobierno».
Aunque el escenario político era similar al actual, los números eran radicalmente distintos. Y en muchas votaciones Sánchez no necesitaba a los de Esteban. Ahora, tanto si gobierna Feijóo como si repite el líder socialista, el ‘sí’ de los cinco del PNV será prácticamente imprescindible para todo, desde una modificación legal hasta los Presupuestos, pasando por la creación de una comisión de investigación.
En paralelo a los movimientos internos que hay en el PNV, capitaneados por Urkullu, hay otras vías de aproximación entre los nacionalistas vascos y el PP a través de otras algunos empresarios con intereses en Vitoria y en Madrid. Pues los cinco diputados del PNV podrían cambiar la correlación de fuerzas en el Congreso, situándose de nuevo como el partido bisagra de la política española y dejando a Junts de nuevo en la marginalidad. Por lo que unos y otros quieren aprovecharse de ello. El PSOE, que ya contactó con ellos este martes, y el PP, que lo hará en los próximos días, quieren su apoyo para la investidura de sus líderes.
Regeneración
En el PNV ya se habla de la necesidad de «regeneración para dar entrada a una nueva generación». El mismo Andoni Ortuzar ha empleado esas palabras. Por eso, explican fuentes del partido, los acercamientos a la posición que abandera Urkullu por parte de algunos de los dirigentes más jovenes hay que leerlos también en clave orgánica y de la renovación de cargos que debe producirse en los próximos meses. Previsiblemente, Ortuzar y Urkullu dejen sus puestos y los que vienen detrás, fogateados en las juventudes de EGI, defienden que la supervivencia institucional del partido depende de no alejarse de las posiciones históricas del PNV.