Tensiones internas en los partidos independentistas que reclaman congresos extraordinarios

Bajan revueltas las aguas en el seno de las formaciones independentistas. La posición fijada por la dirección de los dos principales partidos, el PDeCAT y ERC, ha descontentado a sus bases, que ya se están organizando para provocar la celebración de congresos y convenciones extraordinarias que permitan cambiar su hoja de ruta.

En el PDeCAT, la marcha de su líder Marta Pascal a Madrid para ser senadora y la buena aceptación de la marca JXCat, hace que muchos afiliados que quedaron apartados de las posiciones de poder en el congreso fundacional del partido de hace dieciocho meses -pero con mucho poder institucional- están estudiando como forzar la celebración de un congreso extraordinario para hacer una “reinvención general”.

Los demócratas pretenden con ese congreso, re orientar ideológicamente y orgánicamente la formación nacida a raíz de la disolución de Convergencia. De hecho, ahora ya se habla de “deconstrucción” del PDeCAT. También quieren utilizar la marca JXCat para sumar más personas al proyecto, como ya avanzó Carles Puigdemont hace unas semanas, pero de ello en la dirección del PDeCAT no quieren oír hablar.

En ERC, conferencia ideológica

Con su líder en la prisión de Estremera, Esquerra Republicana también necesita parar y repensarse. Será con toda probabilidad en junio, aseguran fuentes del partido, con la celebración de una conferencia ideológica que tiene que servir para repensar el partido y aclarar las ideas entre el territorio, la dirección, las bases y los votantes.

Algunos afiliados están preparando ya su estrategia de cara a esta conferencia ideológica, que aunque la dirección actual no lo prevé, puede acabar también con un congreso extraordinario con nuevos valores al alza de ERC pidiendo paso a una dirección que lleva ocho años al frente del partido.