DEL TELETRABAJO AL PISCITRABAJO

Sánchez sigue la renuncia de Soria, su contacto con Rajoy y su ‘pacto’ con Iglesias… en la piscina

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Pedro Sánchez, en la piscina de su casa en Pozuelo. (OKD)

Pedro Sánchez quiere ser presidente del Gobierno… desde la piscina de su casa. Así ha seguido el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) la tarde en la que gestionaba sus primeros contactos políticos para sacar a España de la situación de bloqueo en la que él mismo la terminó de sumir la pasada semana con su «no es no» definitivo a Mariano Rajoy en la votación de investidura. Después del teletrabajo y el hipertrabajo de la época de internet, el líder del PSOE ha inventado… el piscitrabajo.

Pedro Sánchez llamó en la mañana de este martes al presidente del Gobierno en funciones. En teoría, lo hacía para iniciar una ronda de contactos «en la que buscar la solución» al  bloqueo institucional. Pero sólo hablaron 10 minutos, en el momento en que Rajoy pudo comprobar que el líder socialista se limitaba a informarle de que se mantenía en su «no rotundo» y definitivo a la oferta de gran coalición del dirigente popular. Si la última conversación de ambos líderes, hace exactamente una semana la calificó Sánchez de «perfectamente prescindible», a pesar de que quien lo había convocado era el candidato propuesto por el Rey, la de este martes ha resultado un mero postureo.

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Pedro Sánchez, en la piscina de su casa en Pozuelo.

Y eso que había muchas cosas de las que hablar. Ya que los socialistas no se avienen a ser oposición, al no facilitar que haya un Gobierno al que oponerse, bien podría Sánchez haberle preguntado a Rajoy sobre la propuesta de su Ejecutivo para que José Manuel Soria ocupara un cargo en el Banco Mundial. Si en lugar de estar planeando los baños de sol, el líder del PSOE hubiese hecho su trabajo, quizá Mariano Rajoy le habría adelantado que «a petición del Gobierno» Soria iba a renunciar al cargo.

Eso sí, a Sánchez le le ha dado tiempo a reflexionar… según la hora de su publicación, se puede colegir que sentado en su césped ha escrito sobre su móvil un tuit de análisis político: «La renuncia de Soria al Banco Mundial pone de manifiesto lo inmoral de la propuesta y las falsedades con que ha intentado justificarla».

También podría haber atendido Sánchez mejor la propuesta de Compromís, de la que no hay reacción oficial del Partido Socialista. Los nacionalistas valencianos han presentado un documento para un acuerdo inmediato de Gobierno entre PSOE y Unidos Podemos. En una nueva iniciativa de este pequeño grupo político que se presenta a las elecciones generales amparado en las siglas de los de Pablo Iglesias, Joan Baldoví ha presentado un documento con 31 puntos de acuerdo para que se forme Gobierno “cuanto antes” sin el PP –claro–, ni los independentistas, pero con la “abstención técnica” de Ciudadanos. Ni se tienen noticias de que haya sido informado alguno de los grupos implicados ni, por supuesto, de la opinión del presunto-no-postulado-para-presidente-líder-del-PSOE.

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Y es legítimo que el lector avisado pueda ahora preguntarse si la llamada en la que Pedro Sánchez y Pablo Iglesias han departido sobre su ‘pacto’ de Gobierno en la tarde de este martes ha sido hecha desde la hamaca, entre chapuzón y chapuzón. Frisando las 18.00 horas, el PSOE ha informado a los medios de que ambos líderes habían intercambiado impresiones telefónicamente sobre la crisis institucional que mantiene a España sin Gobierno desde hace nueve meses. Fuentes socialistas confirmaban que los dos cabezas de lista que aspiraban a gobernar España han coincidido nada más que en que “lo que más le conviene a España es un gobierno que implemente un programa de justicia social y regeneración democrática”… y simplemente han quedado en volver a llamarse.

La piscina de la casa de Pedro Sánchez en Pozuelo parece el mejor sitio que el secretario general del PSOE menos votado de la historia por dos veces consecutivas ha encontrado para seguir tachando nombres de su agenda de llamadas políticas y seguir, quizá, la actualidad leyendo noticias en el móvil.

Allí se puede haber enterado de que el Tribunal Constitucional sí que ha reunido a sus magistrados para inadmitir el recurso de Arnaldo Otegi, quien no podrá ser candidato a lehendakari en las elecciones vascas que se celebran en menos de tres semanas… Claro, que de eso el PSOE tampoco sabía nada, pues ni impugnó la candidatura del etarra recién salido de la cárcel.

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