Sánchez movió el Falcon 18 veces, 10 en vacío, para hacerse la foto en los incendios y volver a La Mareta
El presidente 'ecologista' tardó 10 días en interrumpir sus vacaciones en Lanzarote por los fuegos
También usó 2 Super Puma junto a sus colaboradores para realizar trayectos cortos entre zonas afectadas


El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hizo movilizar el avión Falcon del Ejército del Aire en un total de 18 vuelos, diez de ellos en vacío, con motivo de sus vacaciones en La Mareta y sus tres jornadas de visitas a distintos puntos del nordeste del país afectados por la oleada de incendios forestales de este agosto.
Todo un derroche en gasto público, con el consiguiente desembolso en combustible, y su efecto contaminante, mayor que el de otros medios de transporte como un avión regular. Además, el jefe del Ejecutivo movilizó dos helicópteros Super Puma junto a sus colaboradores en sus tres desplazamientos a la Península desde la Residencia Real de La Mareta (Lanzarote), en Canarias, para visitar y hacerse la foto en zonas arrasadas por los incendios en Orense, León, Cáceres, Zamora y Asturias. En estos destinos, Sánchez estuvo blindado por un dispositivo de seguridad que impidió a los vecinos afectados acercarse a él a menos de 200 metros.
El primero de estos vuelos del Falcon, costeados con el dinero de todos los contribuyentes, se produjo el pasado 2 de agosto, cuando aterrizó en la isla de Lanzarote para iniciar en La Mareta su retiro vacacional. Aquel Falcon regresó en vacío a su base de Torrejón de Ardoz (Madrid) tras haber dejado a Sánchez y su familia en el aeropuerto de Lanzarote, desde el cual se dirigieron en coche el palacio de Patrimonio Nacional en Costa Teguise.
Fue apenas unos días después, a partir del 7 de agosto, cuando la situación se agravó por los incendios desatados en las provincias de León, Zamora y Orense. Sin embargo, el presidente del Gobierno no alteró por los fuegos su descanso veraniego en la isla canaria hasta diez días después, cuando programó para el 17 de agosto una visita precisamente al Centro de Coordinación Operativo Contraincendios de Orense (Galicia) -donde no pisó tierra quemada- y al municipio de Villablino, en León.
Para esta primera salida de Sánchez, un Falcon 900 del Ejército del Aire tuvo que volar en vacío desde Torrejón de Ardoz hasta Lanzarote en la víspera, sábado 16 de agosto, para recoger al presidente y llevarlo al día siguiente hasta Vigo, donde hizo parada el avión. Desde aquí, el jefe del Ejecutivo se desplazó a Orense, primer destino en su agenda.
Después de reunirse aquí con distintas autoridades y proponer un «Pacto de Estado contra el cambio climático», utilizó luego el helicóptero Super Puma del Ejército del Aire para volar hasta el campo de fútbol Paco Potro de Caboalles de Abajo, pedanía de Villablino. Desde este punto se trasladó hasta el Puesto de Mando Avanzado (PMA) de Orallo, otra pedanía de este municipio leonés, donde se retrató junto a cargos locales en un monte quemado.
Al término aquella doble visita el domingo 17 de agosto, el Falcon posicionado en León -a donde voló en vacío desde Vigo- llevó de vuelta a Sánchez hasta Canarias para continuar con sus vacaciones. Ese avión, según ha podido constatar OKDIARIO a través de los registros existentes en plataformas online de tráfico aéreo, hizo noche en Lanzarote aquel domingo y regresó en vacío a la Península en torno al mediodía del lunes. Sin embargo, apenas tres horas después, el Falcon -de nuevo en vacío- volvió a poner rumbo de vuelta a Lanzarote en la tarde de ese lunes 18 de agosto. Sánchez había pedido otra vez el avión presidencial -en pleno debate sobre la falta de medios aéreos apagafuegos- para ir al día siguiente desde Canarias hasta la Península y visitar, en esta ocasión, Cáceres y Zamora.
De esta manera, el Falcon -con Sánchez a bordo- realizó otro vuelo más el martes 19 de agosto desde Lanzarote, e hizo parada en Salamanca. Aquí, el helicóptero Super Puma recogió al presidente socialista y lo llevó hasta las inmediaciones del Puesto de Mando Avanzado (PMA) de Jarilla, en Cáceres. Desde aquí, la comitiva fue al Puesto de Mando Avanzado (PMA) en la localidad vecina de La Granja, donde Sánchez -que tampoco pisó tierra quemada en Extremadura- culpó de los incendios a la «ola de calor», entre aplausos de cargos socialistas que hicieron de palmeros.
Desde Cáceres continuó con su agenda desplazándose en Super Puma hasta la zona afectada de Molezuelas de la Carballeda, en Zamora. De nuevo, tras hacerse fotos en un recorrido fugaz, de menos de una hora, se marchó del lugar a bordo del Super Puma hasta León, donde le aguardaba el Falcon, que había volado hasta allí en vacío desde Salamanca, para llevarle de nuevo hasta Lanzarote, su lugar de vacaciones. Este Falcon también se volvió a su base de Torrejón de Ardoz desde Canarias.
El Falcon para apurar las vacaciones
El jueves 21 de agosto, de nuevo y por tercera vez, el avión presidencial voló en vacío hasta Lanzarote por la tarde con la misión de trasladar a Sánchez al día siguiente hasta Asturias. Y así ocurrió el 22 de agosto, con parada del Falcon en León. El inquilino de la Moncloa usó otra vez el Super Puma para llegar hasta el Principado, donde respaldó en público a su polémica jefa de Protección Civil, Virginia Barcones. De regreso a León, el Falcon volvió a volar hasta Canarias el pasado viernes -aterrizando a las 16:46 hora peninsular- para que Sánchez pudiera empezar así el fin de semana en La Mareta y apurar sus vacaciones. Este Falcon también se volvió en vacío a Torrejón -con escala técnica en Palma de Mallorca- tras cumplir esta misión.
El pasado domingo por la tarde, el avión presidencial fue movilizado de nuevo desde Madrid hasta Lanzarote para traer a Sánchez de vuelta a Madrid en la conclusión de su estancia en La Mareta. Así, este lunes, ese Falcon despegó de Lanzarote a las 11:24 hora peninsular y aterrizó con el presidente socialista y su familia en la base militar de Torrejón a las 13:35 horas. El Super Puma, como en la ida, pero en sentido inverso, les trasladó desde aquí hasta el helipuerto de La Moncloa. En total, desde el 2 de agosto hasta este 25 de agosto, el ecologista Sánchez hizo movilizar el Falcon 18 veces, diez de ellas en vacío.