Sánchez contratará ahora a un científico como asesor en cada uno de los 22 ministerios
El Gobierno pretende incorporar a más de 50 asesores en los próximos meses
Este plan cuenta con un presupuesto de más de 10 millones de euros anuales
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que incorporará al Ejecutivo en los próximos meses más de medio centenar de asesores científicos. El dirigente socialista va a crear la figura del asesor científico en cada uno de los 22 ministerios que conforma su Ejecutivo. Su función será la de «conectar las preguntas de su ministerio con universidades y centros de investigación».
Así lo ha explicado este jueves Sánchez durante la presentación de la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico (ONAC) en la sede del CSIC en Madrid. Se trata de un nuevo plan ideado por el jefe del Ejecutivo con el objetivo de «extender la ciencia a la administración pública y al proceso de toma de decisiones».
Pedro Sánchez ha justificado esta decisión de incorporar más asesores a su Gobierno, en este caso asesores científicos, en que «ahora más que nunca es necesaria la ciencia ante los negacionistas». «En estos tiempos tan líquidos, en los que proliferan los partidos políticos o los influencers que niegan las propiedades de las vacunas, la eficacia de las políticas distributivas o la existencia del cambio climático, es más necesario que nunca el aporte de la ciencia, y mirar desde la política a los científicos y las científicas», ha asegurado este jueves en una intervención pública.
El Ejecutivo del PSOE y Sumar movilizará a más de 50 investigadores, en un plan coordinado por la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico (ONAC) de la Moncloa. Esta institución lleva en marcha unos meses y su creación se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado mes de febrero. Este jueves ha sido presentada en un acto público presidido por Sánchez y con la participación de la ministra de Ciencia, Diana Morant.
El objetivo, según ha sostenido el jefe del Gobierno, es «crear nuevos vínculos y espacios de colaboración entre el Gobierno y las universidades y centros de investigación públicos, para que el conocimiento científico ayude a diseñar mejores políticas y tomar más decisiones basadas en la evidencia empírica». Para ello, se ha diseñado una estrategia «con diversas medidas agrupadas en tres apartados: el de personal, el fomento de la investigación aplicada y mecanismos institucionales».
Entre las medidas de personal se incluye la figura permanente de un asesor científico en cada uno de los 22 ministerios. La idea es que «cuando los miembros del Gobierno tomen decisiones, además de un informe que diga si la decisión se ajusta o no a la ley o a la capacidad económica, haya un papel que avale su evidencia científica».
En el plan se especifica además estancias de 6 a 8 meses de investigadores en los ministerios o en organismos dependientes de estos para trabajar en retos concretos, además de una unidad de asesoramiento científico que estará ubicada en el CSIC y que conectará al Gobierno con investigadores de todo el sistema de I+D+i, tanto público como privado, y también de centros científicos en comunidades. Esta unidad estará formada por 11 o 12 expertos.
10 millones de euros
Las convocatorias de personal se han hecho públicas este jueves y con las que el Gobierno de Sánchez pretende incorporar en los próximos meses a entre 50 y 80 investigadores como asesores. Estos científicos procederán de todas las áreas del conocimiento y este «ecosistema» de asesoramiento contará con 10 millones de euros anuales. Se trata de una cantidad que coloca a España por delante de otros países del entorno, según afirma el Oficina Nacional de Asesoramiento Científico.
Desde el punto de vista de la investigación aplicada, la finalidad es «buscar desde su diseño responder a preguntas que tiene la sociedad». «El nuevo ecosistema tendrá una dotación anual de dos millones de euros para financiar proyectos de experimentación, análisis de datos públicos y otras formas de investigación aplicada», señalan desde la ONAC.
Pedro Sánchez ha asegurado también que «la ciencia no puede decidir», por «no ser la depositaria de la soberanía popular». «Las instituciones públicas sí tienen la obligación moral de escuchar y atender a la ciencia», ha indicado.
El dirigente socialista se ha mostrado convencido de que una sociedad y un país que base sus decisiones en el conocimiento tendrá siempre una democracia «más eficaz, más robusta y más equitativa».
La Oficina Nacional de Asesoramiento Científico asegura que al Gobierno se incorporarán como asesores científicos «sin ideología» para que esta iniciativa sea estable en el tiempo, con independencia de quien gobierne.
Si bien hay ministerios más acostumbrados a este asesoramiento científico, como el de Ciencia, Innovación y Universidades, el de Transición Ecológica o el de Agricultura y Pesca, la acogida de este nuevo ecosistema ha sido muy favorable entre el resto de departamentos, apuntan desde la ONAC.