El PP creará una oficina para garantizar que se cumple su nuevo código ético: «Quien la hace, la paga»

Claridad y exigencia son algunos de los principios en los que se fundamenta la nueva ponencia estatutaria del Partido Popular. El documento, hecho público este miércoles, propone la creación de una Oficina de Cumplimiento Normativo para velar por el código ético y de conducta de todos los miembros de la formación política. Según Daniel Sirera, líder del partido en Barcelona y ponente, para ejecutar la premisa de que «quien la hace, la paga».

«Frente a un PSOE que protege y tolera y normaliza los escándalos, nosotros defendemos la ejemplaridad y la transparencia de nuestros cargos», ha destacado Sirera en la presentación de lo que vienen a ser los nuevos estatutos del PP. Mismos, que esperan contar con el aval de la militancia en su próximo congreso nacional que se celebrará los días 4, 5 y 6 de julio en Madrid.

El actual contexto político que vive España -sobre todo a raíz de los escándalos que apuntan a una presunta trama corrupta en el seno del PSOE- han fundamentado gran parte del documento que pretende asentar las bases de la manera de actuar del partido que preside Alberto Núñez Feijóo. También la normativa interna con la que se comprometen afiliados, militantes y simpatizantes del PP.

Entre las novedades que incorpora el texto se encuentra la creación de un órgano especializado a nivel nacional, con poderes autónomos de iniciativa y control del Programa de Cumplimiento Normativo del PP, para establecer a nivel organizativo un programa de cumplimiento normativo. En otras palabras, se trata de un organismo que pretende garantizar el código ético que se espera poner en marcha en los nuevos estatutos.

Código ético y de conducta

El código ético y de conducta del PP se trata de un documento con el que se comprometen todos los miembros del partido. Desde sus bases hasta sus cargos políticos y orgánicos.

El último reglamento que en este sentido aprobaron los populares fue en el año 2023. Un escrito que establece la línea de actuación y estándares de comportamiento interno para «constituir la cultura de cumplimiento de la legalidad y de tolerancia cero» hacia aspectos como la corrupción. Un principio además, con el que el PP se compromete a combatir como valor esencial.

Entre sus aspectos más relevantes, incorpora una seria de medidas para garantizar la transparencia, la austeridad o el régimen de contratación con terceros, entre otros. Y añade situaciones sancionables como la aceptación de regalos o favores, el empleo del partido para influir en actividades públicas o resoluciones administrativas o la gestión de su patrimonio.

Consejos y comités

La nueva ponencia estatutaria del partido añade la creación de un Consejo de inmigrantes residentes en España. Una oficina novedosa con el fin de «dar voz y ayudar a participar en la vida pública» a personas procedentes de otros países. Según han recogido los ponentes del documento, llegados en su gran mayoría de estados como Cuba o Venezuela.

Tal y como ha argumentado el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Barcelona y proponente del texto, Daniel Sirera, «para que también puedan ser testimonio de lo que es capaz de hacer la izquierda cuando no tiene controles ni límites».

Los nuevos estatutos del PP, que serán tomados en consideración por la militancia, añaden también la creación de un Consejo de presidentes autonómicos, para establecer la estrategia conjunta y coordinar la acción del partido; un Comité de alcaldes de grandes ciudades, y un tercer Comité de coordinación entre diputados, cabildos y consejeros autonómicos del partido.