Podemos exige comer menos carne mientras ofrece filetes de ternera en sus ministerios
Así figura en el contrato de restauración que firmó el departamento de Pablo Iglesias en 2020 y que sigue vigente
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Mientras Unidas Podemos exige a los españoles que coman menos carne, en sus ministerios se sirven platos de filetes de ternera y de pollo, tras incluirlo en el pliego de contratación. Es el caso del Ministerio de Derecho Sociales que dirige Ione Belarra y del Ministerio de Consumo, del propio Alberto Garzón, impulsor de una campaña que ha soliviantado a los ganaderos y demás profesionales del sector cárnico, en general, y a los consumidores, en particular.
Ambos ministerios tienen su principal sede física en el número 18-20 del Paseo del Prado de Madrid, compartiendo instalaciones con el Ministerio de Sanidad, que es el que tradicionalmente se ha ubicado en este inmueble. En la actualidad sigue vigente (y así será hasta el próximo 31 de julio) el contrato de «servicio de restauración en la cafetería- comedor y venta automática mediante máquinas expendedoras en el edificio de Paseo del Prado 18-20 de Madrid», que fue adjudicado por el departamento del entonces ministro de Derecho Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, que ejercía de vicepresidente segundo del Gobierno y ocupaba el despacho que correspondía al ministro de Sanidad.
El citado pliego, con sello de la Oficina presupuestaria y gestión económica del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, dirigido por Pablo Iglesias en el momento de la contratación, recoge que este servicio fue de restauración fue firmado con un año de duración a partir del 1 de octubre de 2020, fecha de formalización, por lo que todavía sigue vigente.
El contrato, adjudicado a Colectividades Ramiro SL por un importe de 26.400 euros (impuestos incluidos), señala que la empresa está obligada a ofrecer dentro de su carta, entre otros productos, platos combinados que incluyen «filetes de ternera de 110 gramos» o de «pechuga de pollo de 120 gramos». También forman parte del listado requerido raciones de «morcilla», «chorizo de pueblo» o «jamón ibérico», así como sándwiches de «jamón serrano».
«De primer nivel»
En este procedimiento, el ministerio de Iglesias ahora dirigido por Belarra emplazó a la firma contratada que prestara un «servicio y consumiciones de primer nivel» y, de igual modo, «productos de marcas de reconocida calidad y prestigio». En concreto, las condiciones generales recogen que el «servicio a prestar, así como la calidad de los artículos y consumiciones que se ofrezcan al público, deberán ser equivalentes a los de una cafetería de primera categoría, según la reglamentación vigente y a los de un restaurante de buen nivel y calidad». Junto a ello, se establece que los «productos que se utilicen para el servicio deberán pertenecer a marcas comerciales de reconocida calidad y prestigio».
Además, quedó fijado que el tipo de mantelería que ha de colocarse en caso de «comidas especiales», es decir, aquellas de altos cargos, debe ser «de tela» y no papel como en el resto de comidas.