Sánchez se prepara para eliminar a críticos como Díaz, Page o Mendia y blindarse ante una derrota general

Nicolás Redondo y Joaquín Leguina han sido los primeros purgados por el PSOE tras el desastre del 4M. El mismo día 5, un día después del desastre electoral del PSOE en las muy recientes elecciones madrileñas, Moncloa filtró su deseo de acelerar las primarias de su partido en Andalucía para poder sacar de su estructura a Susana Díaz. Pero la criba no acabará ahí. Pedro Sánchez prepara una limpia general en el PSOE que afectará, al menos, a País Vasco, Castilla-La Mancha y la citada Andalucía.

Ferraz se prepara para una derrota general. Y, por lo visto, el toque de queda para poner a punto los cuarteles de invierno ya se ha realizado. Pedro Sánchez conoce las encuestas y sabe que el rebufo de la victoria del PP en Madrid puede llegar a muchos otros territorios. Y no quiere encontrarse un partido con rivales.

Isabel Díaz Ayuso advirtió de que “Madrid será la pesadilla de Pedro Sánchez”. Y así parecer ser. El PSOE ya ha impulsado unas primarias urgentes en Andalucía. Las anunció el 5 de mayo, sólo un día después de la colosal derrota de la izquierda en Madrid. ¿Cuál es el motivo de fondo? Obviamente, sacar de escena a Susana Díaz, líder de los socialistas andaluces y los que se negaban a adelantar las primarias en Andalucía.
Susana Díaz es, a la sazón, una de las grandes enemigas internas de Pedro Sánchez.

El PSOE de Ferraz tiene ya decidido, de hecho, el sustituto de Susana Díaz: Juan Espadas, el actual alcalde de Sevilla. De este modo, se estima que el próximo mes de junio albergará esas primarias andaluzas al candidato del PSOE-A a la Presidencia de la Junta de cara a las próximas elecciones autonómicas andaluzas. Y si el plan de Sánchez sale adelante, una preocupación menos para su posible vuelta tras una salida de Moncloa.

PSOE vasco

No es el único territorio donde huele a ataque. El PSE -País Vasco- está comandado por Idoia Mendia. Y aunque ha cumplido fielmente con las exigencias de Pedro Sánchez en materia de acercamiento a Bildu o PNV, lo cierto es que en el PSOE no olvidan que ella fue persona cercana a Patxi López. Y eso, por lo visto, puede convertirse en un factor decisivo en una etapa de retorno al partido del ahora presidente del Gobierno.

Entre los aspirantes a sustituir a Mendia figura el secretario general del PSE de Gipúzcoa, Eneko Andueza, una persona que puede encajar aún más en los nuevos vientos del PSOE de Sánchez. Andueza, de hecho, llegó a afirmar que, aunque no es partidario de «hacer purgas» en las formaciones políticas y consideró que el PSOE «en algún momento debe decirle a Felipe González que ya basta”.

Su frase surgió en plena exigencia de Bildu de investigar el pasado del PSOE por los GAL. Y Andueza añadió que «yo no soy partidario de hacer purgas en los partidos. Viendo nuestros estatutos, quizás no haya razones para expulsarle del partido, pero, en algún momento, quizás deberemos decirle a Felipe González que ya basta. En esto voy a ser contundente». «La historia del GAL me parece repugnante, y, si mi partido ha tenido algo, que lo pague el que lo ha hecho”, culminó.

El PSOE en Castilla-La Mancha

El tercer flanco de la guerra fría en el PSOE se ha abierto ya en Castilla La Mancha: Emiliano García-Page, el presidente regional, nunca ha sido seguidor de Pedro Sánchez. Al revés, forma parte del grupo de críticos con la labor de Sánchez desde su llegada.

Y el presidente del Gobierno ha tomado nota. Tanto, que ya cuenta con un perfil de su agrado para ir forzando el relevo: la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, persona que ya ha sido designada para formar parte del Comité Organizador del Congreso Federal del PSOE que se celebrará el próximo mes de octubre. Todo un reto que le ha confiado directamente la dirección nacional del partido encabezada por Pedro Sánchez.

Ese Comité Organizador contará con un muy reducido número de personas, entre ellos, como coordinador general, el secretario general del PSOE, José Luis Ábalos, en la Coordinación Adjunta Política, Adriana Lastra, y en la de Planificación, Santos Cerdán. Cambios pensados por Sánchez en una única dirección: la de hacer aún más suyo el PSOE. La de prepararlo para ser el cuartel de invierno en caso de una salida de Moncloa.