Montero también criminaliza a los hombres por el cambio climático: «Inactivos y escépticos»

Un nuevo informe elaborado por el Ministerio de Igualdad de Irene Montero ahonda en las «diferencias» entre hombres y mujeres. Esta vez, a propósito del cambio climático. El trabajo lleva por título Riesgos Climáticos desde la Perspectiva de Género. Percepción, posicionamiento y adaptación en mujeres y hombres y califica a los hombres de «inactivos» y «escépticos» ante los fenómenos y catástrofes medioambientales.

El estudio -que ha tenido un coste de 12.000 euros- concluye que la actitud de hombres y mujeres ante los efectos del cambio climático difiere notablemente. Así, el 84% de las mujeres considera que ya se notan los efectos del cambio climático, 13 puntos más que los hombres.

«Llama especialmente la atención la mayoría de respuestas de los hombres que indican escepticismo («creo que haga lo que haga no va a servir de nada») o de inactividad («no haría nada») ante los principales fenómenos climáticos adversos sobre los que se pregunta directamente (aumento de la temperatura media, inundaciones e incendios forestales)», señalan los autores.

«Son más los hombres los que declaran que los efectos del cambio climático les resultan indiferentes y quienes pronostican que aún no se están sintiendo o incluso que nunca se sentirán», es otra de las conclusiones.

Según este estudio, un 7% de los hombres afirma que nunca se sentirán los efectos del cambio climático, frente al 1,3% de las mujeres que tienen la misma opinión. Los hombres que consideran que no viven en una zona de riesgo son un 8,9% más que las mujeres.

Según el estudio de Montero, las catástrofes causadas por el cambio climático que más preocupan a la población hacen referencia a los incendios forestales (82%), el calentamiento global (80%) y la contaminación del aire (79%).

Le siguen otros desastres medioambientales con altos niveles de preocupación (alrededor del 70%) como las sequías y las inundaciones, las olas de calor y otros fenómenos climáticos extremos como el granizo o las grandes borrascas. Por sexo, se observa que las mujeres presentan medias de preocupación significativamente más altas a las de los hombres en todos los tipos de riesgos, pero sobresalen aún más las diferencias en las opciones de «otros fenómenos extremos», el calentamiento global, las olas de calor y las inundaciones.