Montero sigue a lo suyo: gasta 70.000 € en saber si los trans tienen «prejuicios cisheteronormativos»
"En España siguen existiendo numerosos obstáculos que impiden que la igualdad", dice Montero
Montero dice que las mujeres trans «tienen más dificultad económica para adquirir productos menstruales»
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Irene Montero está exprimiendo al máximo su tiempo al frente del Ministerio de Igualdad. Pese a encontrarse en funciones, la ministra ha vuelto a encargar uno de sus polémicos estudios, a costa de las arcas públicas. En esta ocasión, gastará 70.000 euros en un informe sobre «la situación de las personas LGTBI con discapacidad en España» que, entre otros aspectos, se encargará de analizar si han asumido «estereotipos y prejuicios cisheteronormativos» y sus «consecuencias».
Los «prejuicios cisheteronormativos» son según el léxico del feminismo radical el conjunto de normas por la que se rigen las personas cuya identidad de género se corresponde con la que le fue asignada al nacer. Para Igualad podría considerarse «una forma de discriminación hacia el colectivo LGBTIQ+, debido a que da invisibilidad a la diversidad sexual y a todas aquellas personas que no se sienten identificadas con estas ideas».
Igualdad sacó a licitación este contrato el pasado martes, dos días después de las elecciones generales. Montero justifica que «los avances sociales y en materia de protección de derechos precisan del conocimiento científico para impulsar políticas publicas eficaces, basadas en la evidencia de los datos y el rigor de la comprobación, y no en la intuición o en los estereotipos». El estudio examinará los ámbitos en los que se produce discriminación por motivo de la «orientación sexual o identidad de género», así como las «necesidades y demandas» del colectivo.
«En España siguen existiendo numerosos obstáculos que impiden que la igualdad legal se convierta en una igualdad real y efectiva. Uno de ellos, de especial gravedad, son los delitos de odio cometidos por motivo de orientación sexual, identidad o expresión de género», expone el departamento de Irene Montero. Igualdad considera que «es necesario concienciar al conjunto de la ciudadanía y poner en valor la diversidad sexual, de género y familiar, desde el convencimiento de que las sociedades inclusivas, igualitarias, solidarias y tolerantes son también más fuertes y resilientes».
Así, el estudio analizará este colectivo a fondo, «sus experiencias de discriminación y victimización, la asunción de estereotipos y prejuicios heteronormativos y capacitistas y sus consecuencias».
Cabe reseñar, por si el lector se lo pregunta, que la «cisheteronormatividad» sería, según la definición que ofrece la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB), es un «conjunto de creeneicas e ideas asimiladas a lo heterosexual y cisgénero, cuyo arraigo produce un tipo de opresión sobre estos colectivos».
Polémicas
Desde su llegada al cargo, los estudios e informes encargados por Irene Montero han resultado especialmente comentados. En relación con la transexualidad, uno reciente concluía que las mujeres trans son las que «sufren más tabú sobre la menstruación que el resto de mujeres» y «tienen mayor dificultad económica en adquirir productos menstruales». También se aseguraba que «tienen un mayor conocimiento del aparato reproductor femenino» o «ven la menopausia como un problema para la mujer».
Cabe recordar que una de las medidas más aplaudidas por Irene Montero en esta legislatura ha sido la Ley Trans, impulsada porsu Ministerio, y que permite el cambio de sexo a partir de los 12 años sin informes médicos ni psicológicos ni tratamientos hormonales, como ocurría hasta su aprobación.