El juez Velasco destrozó el pacto de Maíllo y Villegas para que Sánchez dejara el poder «temporalmente»

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El coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, y el secretario general de c's, José Manuel Villegas.

Un pacto alcanzado entre el secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, y el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, preveía una «retirada temporal» de Sánchez de la presidencia del Gobierno de la región de Murcia a la espera de la resolución del ‘caso Auditorio’. Pero todo se rompió, según fuentes populares, con el auto del juez Eloy Velasco de este lunes, cuando el magistrado de la Audiencia Nacional que instruye el caso Púnica instó al Tribunal Superior de Justicia de Murcia (TSJMU) a investigar a Pedro Antonio Sánchez por un presunto delito de fraude.

Velasco entiende que, durante su época como consejero de Educación, el presidente murciano mantuvo relación con el empresario implicado en la ‘Púnica’ Alejandro de Pedro para contratarle para servicios de mejora de su reputación en Internet. No obstante, el juez admite que el contrato, que se pagaría con dinero público, no llegó a realizarse, como el propio Sánchez ha defendido siempre. Según Velasco, ello no evita que se le pueda imputar un delito de fraude.

El plan que habían trazado los dos dirigentes de ambas formaciones socias de legislatura en Murcia era que Sánchez dejara el cargo en tanto que el instructor del ‘caso Auditorio’, Julián Pérez Templado, decidiera finalmente si le retira la imputación al presidente de Murcia. Sánchez declaró como imputado el pasado 6 de marzo, por los presuntos delitos de prevaricación continuada, fraude contra la administración pública, falsedad en documento oficial y malversación de caudales públicos.

Las diligencias se refieren al proyecto, adjudicación y recepción de las obras de dicha instalación en Puerto Lumbreras cuando Sánchez era su alcalde.

Además, aún pendía sobre el líder del PP murciano, recién renovado en su cargo en la formación el pasado 18 de marzo, la posibilidad de que Velasco tratara de imputarlo en el ‘caso Púnica’, a pesar de que nunca se llegaron a firmar los contratos que podrían constituir el tipo penal .

Una vez retirado del cargo de presidente del Gobierno murciano, PP y C’s habían pactado esperar también lo que preveían como «un máximo de uno o dos meses» a que esta posible acusación también quedara en nada. De hecho, ya son 15 las denuncias y querellas presentadas contra Sánchez —casi siempre por el PSOE que ahora quiere desalojarlo del poder con una moción de censura— que han sido sobreseídas.

Pero la exposición razonada de Velasco dio al traste con los planes. Los dirigentes de Ciudadanos se pusieron en contacto con los populares y anunciaron que rompían el acuerdo nada más conocer el texto del magistrado, a pesar de que el pacto se iba a hacer público ese mismo día o, a más tardar, este martes, según las fuentes consultadas.

Ambas formaciones, de hecho, ya estaban estudiando las vías jurídicas y legales para sustanciar el acuerdo y que la retirada temporal del cargo pudiera ser efectiva y garantizada en caso de quedar Sánchez, una vez más, exonerado de toda sospecha. Así, al cabo de uno o dos meses, el presidente de la Región de Murcia habría sido repuesto en su posición, limpio de acusaciones penales y salvaguardando las posiciones políticas de uno y otro partido.

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