Ayuso: «Cambiaré la ley de Telemadrid y eso implicará el cambio de la cúpula»
PREGUNTA.- El pasado sábado, durante su toma de posesión, el primer canal de Telemadrid cortó la emisión del que es el acto institucional más importante de la comunidad. ¿Qué le pareció esa actuación de Telemadrid?
RESPUESTA.- De eso me he enterado hoy en otra entrevista.
P.- Usted, además, es periodista…
R.- Nosotros dimos la señal, precisamente, para que todas las cadenas pudieran conectarse y desconectarse cuando consideraran. Bueno, tampoco, tampoco sé qué deciros. Lo que sí sé es que, como presidenta de la Comunidad de Madrid, que gestiona una administración que destina un dinero importante a un organismo público, tengo que tener una opinión acerca de qué televisión queremos. Igual que tengo que decir qué Sanidad queremos o qué colegios queremos.
Me gusta que siga siendo una cadena austera, pero que a su vez refleje en las audiencias y en el día a día de los madrileños su presencia y lo justifique. Porque si no, ¿para qué la tienes? Creo que tiene que dar un impulso nuevo hacia la digitalización. Tiene que ser una relación más cercana, más moderna. Y que se vea representado en ella el Parlamento de la Comunidad de Madrid, que son los representantes elegidos en las urnas y que actualmente, no ocurre. Por eso, creo que ahora se abre un proceso de cambio que me parece que es acorde a los tiempos y que ocurren en todas las administraciones.
P.- ¿Va a cambiar el estatuto de Telemadrid?
R.- Bueno, eso lo tendrá que decidir la Cámara. Lo que a mí me importa es que sea una televisión de cercanía, con información constante, de servicio público y que refleje lo que es hoy la Comunidad de Madrid, donde pasan las cosas importantes. Quiero que se vea ahí y que no abandone nunca a los pueblos, porque cuando Telemadrid va un pueblo, ese fin de semana se llena de turistas. Los pueblos de Madrid están aquí al lado, pero muchas veces se habla poco de ellos, necesitan su televisión. Hay muchas comunidades autónomas que no tienen, así que, ya que está… Lo que tiene que ser es austera y eficaz.
P.- ¿Eso significa que va a cambiar al director general?
R.-Hoy [por ayer] el Partido Popular en la Asamblea de Madrid va a registrar una iniciativa para adecuar la nueva composición de la dirección de la cadena al Parlamento; porque igual que ha cambiado uno, tiene que cambiar la otra, del mismo modo que se cambian las direcciones de las consejerías.
P.- O sea, que va a haber cambio. ¿Qué necesitan para hacerlo? Con mayoría absoluta les basta.
R.- Sí, ahora por una ley, lo que va a pasar es que se va a registrar la duración de la nueva dirección. Luego ya, a partir de ahí, saldrá resultante un nuevo equipo para los próximos años.
Sanidad y Pandemia
P.- ¿Se arrepiente de alguna de las decisiones que ha tomado en política sanitaria? Esa es la primera pregunta. Y la segunda tiene mucho que ver con la primera. Usted ¿no tiene la sensación de que en algún momento de la pandemia, desde los medios de izquierda y desde La Moncloa Iván Redondo, lo que querían es que empeoraran las cifras de incidencia en Madrid?
R.- Bien, yo creo que la primera pregunta y la segunda van un poco en la misma línea. Si hay algo que podríamos haber hecho mejor desde Sanidad es haber reforzado el equipo de comunicación, que es el principal problema que hemos tenido aquí: cuando había un problema era sólo en un hospital de Madrid, cuando había un éxito en la sanidad pública y en Madrid se silenciaba; cuando conseguíamos crear o hacer algo en positivo, no existía.
Pero si había que tomar unas imágenes en televisión o preguntar a un sindicalista supuesto experto, eran siempre los mismos. Y así es como hemos estado batallando todo este tiempo. Con las cosas que se pueden hacer mejor no nos debemos conformar nunca, pero los hitos que ha alcanzado la sanidad pública en Madrid han sido incuestionables. El próximo jueves viene el presidente del Comité de las Regiones a Madrid. Otros organismos nos están mirando desde fuera y nos reconocen la proeza que ha significado crear dos hospitales en mitad de una pandemia, construir uno de ellos en cien días de forma permanente, el análisis de las aguas residuales del Canal de Isabel II, los tests de antígenos, las zonas básicas… todo lo que hemos hecho ha sido un referente para el mundo y nos ha permitido no tener que cerrar del todo la economía. Esa es la sanidad pública.
P.- ¿Qué opina de lo que pasó con el Zendal y de los ataques inauditos que sufrió? La izquierda siempre está reclamando más medios técnicos y humanos, más hospitales, más centros sanitarios. Usted construye uno en cien días, en poco más de tres meses, y la ponen a parir, le cae la del pulpo.
R.- Pues ya se ha visto: fue llevar la denuncia a la Policía Nacional y acabaron los boicots. Ahora, lo que estamos haciendo es que el Zendal esté al servicio del resto de los hospitales. Es un hospital al servicio de los demás. Si hubiera una catástrofe, una inundación u otro virus, la idea es que el Zendal ayude a los demás hospitales a no colapsar nunca. Y si, por ejemplo, tres hospitales, como va a ocurrir ahora con la reforma integral de La Paz, necesitan espacio para poder agilizar sus obras, también tienen a disposición este hospital, que, además, sirve como laboratorio regional, como almacén, centro de distribución del material al resto de los hospitales y ser más eficaces en la compra y venta de ese material. Es un servicio que se ofrece a los demás y el tiempo le va a dar la razón. Ahora, es la macrovacunación, después será otra cuestión. De una u otra manera, todo el mundo lo va a necesitar en un momento dado y es un hospital que va a desahogar siempre a los demás y que se está convirtiendo en un lugar querido por todos los madrileños. Quienes han pasado por él lo han visto y la verdad es que es una obra impresionante.