Belarra evita dirigirse a la militancia de Podemos y deja a la condenada Isa Serra presentar su candidatura

La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, no ha presentado este sábado su candidatura a la secretaria general de Podemos en la Cuarta Asamblea Ciudadana celebrada en Alcorcón.

A diferencia de sus dos adversarios, Fernando Barredo y Esteban Tettamant, quienes sí han defendido personalmente sus propuestas, Belarra ha dejado en manos de la condenada por agredir a la Policía Isa Serra y a Javier Sánchez la presentación de la candidatura que se postula como clara favorita para suceder a Pablo Iglesias.

Además, después de ellos también han subido al escenario para vender las bondades de la candidatura de Belarra el secretario general de Podemos Castilla y León, Pablo Fernández, y Lilith Vestrynge.

A pesar de que Ione Belarra ha acudido al auditorio Paco de Lucía de Alcorcón, donde se está celebrando la Asamblea conocida como Vistalegre IV, ha decidido no subir al escenario y evitar dirigirse personalmente a los militantes de Podemos en que consiste su candidatura ‘Crecer’, algo inusual en alguien que quiere mostrar liderazgo.

Una candidatura que, a pesar de partir como clara favorita por estar apoyada por la estructura de Podemos, ha recibido muchas críticas por, en primer lugar, presentarse 13 días antes del plazo estipulado para hacerlo y, en segundo lugar, por presentar más candidatos de los permitidos.

Así, en lugar de presentar al máximo de 62 candidatos, la sucesora de Pablo Iglesias al frente del ministerio de Derechos Sociales -y pronto también, previsiblemente, al frente de Podemos- ha presentado ‘Crecer’ con 97 miembros para el Consejo Ciudadano Estatal.

Una «trampa» que no ha dudado en afearle Fernando Barredo, quien ha opinado hoy durante la presentación de su propuesta que se va a producir un «pucherazo» en el proceso de Primarias y que la Asamblea «no es democrática».

Para este militante, muy crítico con las estructura del partido, Belarra quiere imponer un sistema de «inquisición interna» para controlar a los «críticos y la diversidad».

«Toda la gente que se ha ido, se ha ido porque aquí no hay democracia interna», ha insistido antes de instar a «resetear» Podemos y calificar al proceso de primarias del «más opaco de Europa».