Ineco, la empresa pública donde Ábalos enchufó a Jésica, asegura que trabajó 3.684 horas
El ente público ha aportado la documentación que lo acredita a la Fiscalía
Insiste en que su versión ante el juez no se ajusta con la realidad

La empresa pública Ineco asegura que Jésica Rodríguez, la que fuera pareja del ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, sí tuvo una relación laboral con la compañía. Así lo ha hecho saber en un mensaje interno enviado a sus empleados en el que detalla que llegó a enviar parte diario de sus «tareas desarrolladas», que terminaron sumando un total de 3.684 horas trabajadas.
El ente público, dependiente del Ministerio de Transportes, ha entregado además a la Fiscalía Anticorrupción la documentación que lo acreditaría y con la que intenta poner en entredicho el testimonio prestado por la joven ante el Tribunal Supremo el pasado 27 de febrero.
La mujer sostuvo ante el juez instructor del caso, Leopoldo Puente, que cobró de Ineco durante el periodo de tiempo que estuvo contratada como personal administrativo pero que nunca se le requirió ir a trabajar. Es más, añadió que entre sus funciones estaba la de estar pendiente de si Joseba García, el hermano del ex asesor de Ábalos, que también trabajaba allí, le podía necesitar.
A través de un comunicado, Ineco insiste en que la versión aportada por la que fuera pareja del ex ministro sobre su relación laboral con la entidad, no se ajusta con la realidad. Según el escrito remitido a la Fiscalía, su testimonio no coincide «con la documentación interna existente y los actos propios que ella misma dejó registrados y que acreditan fehacientemente que existió actividad laboral». Y detalla incluso que el seguimiento sobre su trabajo se intensificó durante la pandemia del COVID-19 y la implantación del teletrabajo.
La entidad, que ha comunicado su «total disposición a colaborar con el Ministerio Fiscal», ha trasladado también al fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón, -que lleva el caso en el Supremo- los registros de control horario y partes de trabajo que recogen las horas trabajadas y asignadas al proyecto, el contrato laboral, los correos electrónicos en los que la que fuera pareja de Ábalos detallaba su carga de trabajo pormenorizada y solicitudes de vacaciones.
También ha aportado las comunicaciones con sus responsables relativas a incidencias en el desarrollo de sus funciones y certificaciones mensuales de los trabajos realizados, revisados, aprobados y abonados por el cliente Adif Alta Velocidad, así como la relación jurídica entre Ineco y esta empresa que trajo causa de su contratación.
Jésica Rodríguez, que fue fichada en el marco de un contrato temporal como auxiliar administrativo, estaba encuadrada en el «servicio de asistencia técnica para apoyo técnico a la gestión administrativa de Adif Alta Velocidad», misma entidad en la que se encontraba al frente Isabel Pardo de Vera, ex presidenta de Adif, que también testificó ante el Supremo por su vinculación en la causa.