Toxo no deja a Sordo ir solo a su cita con Rajoy para exigir el fin del inexistente «despido libre»
El recién elegido secretario general de Comisiones Obreras (CCOO), Unai Sordo, se reunirá por primera vez este lunes con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, en el Palacio de la Moncloa. A la cita también acudirá su antecesor en el cargo, Ignacio Fernández Toxo, «para guiarle y adecuar el tono de la negociación», según las fuentes consultadas.
Sordo ya ha demostrado que no piensa ceder terreno a la hora de reivindicar los compromisos que viene exigiendo el sindicato al Ejecutivo y, según las mismas fuentes, «Toxo no quiere dejar solo a Sordo para que Rajoy y éste tengan buen empiece y fluya esa relación». Fuentes del sindicato ya han concretado que Sordo exigirá el fin del «despido libre», figura que no existe en España, y criticará la temporalidad de los empleos. «Son prácticas erróneas que deben corregirse», señalan.
El hasta ahora líder de CCOO en el País Vasco será el quinto líder del sindicato en democracia, tras Toxo, José María Fidalgo, Antonio Gutiérrez y Marcelino Camacho. El nuevo secretario general de CCOO ya avanzó el viernes en declaraciones a los medios que trasladaría a Rajoy varios mensajes sobre el mercado de trabajo en España y las pautas «profundamente erróneas» en las que se mueve.
Sus objetivos principales
En su primer discurso como líder de CCOO y ante la ministra de Empleo, Fátima Báñez, Sordo abogó por «modificar sustancialmente o derogar» las últimas reformas laborales y cambiar un modelo de empleo, basado en la temporalidad y el despido barato, «injusto» y «segregador».
Junto a esto, también pidió cerrar rápido un acuerdo salarial para este año que sirva de guía y permita a los trabajadores «mejorar su poder de compra», así como subidas de las pensiones y lograr la implantación de una renta básica.
También señaló, entre esas tareas más inminentes, la necesidad de jugar un papel relevante en la elaboración de los Presupuestos para 2018, un debate en el que incidirá a partir de este lunes. Y para ello insistió en la necesidad de reforzar la acción sindical y estar más cerca de los trabajadores en las empresas y en la sociedad.
«Lo que la empresa ha desintegrado, que lo integre el sindicato, representemos a los más precarizados», recalcó Sordo que también criticó en España haya un impuesto de sociedades que, en la práctica, está «por debajo de [los impuestos] que pagan las nóminas».
«Hay que pegar una pensada de fondo a los impuestos de sociedades», señaló. Sordo enmarcó esta reflexión en la necesidad de un nuevo sistema fiscal que permita una distribución de la riqueza más justa en España, uno de los grandes temas que, a su juicio, debe afrontar España, junto a un cambiante mercado de trabajo en un mundo globalizado y con grandes retos tecnológicos.
«Tengo la enorme responsabilidad de responder a la confianza que se me otorga y a la Comisión Ejecutiva […]. El sindicato se va a dejar la piel para resolver los enormes retos que tiene el mundo del trabajo», defendió Sordo. «Tenemos que salir de aquí a la ofensiva, con la cabeza alta, sabiendo que la sociedad y las empresas nos esperan», concluyó.
Sordo, único candidato que optaba a suceder a Toxo, salió elegido con el respaldo del 88% de los votos y con una nueva Comisión Ejecutiva, totalmente paritaria, de la que forma parte el ex dirigente de CCOO en Andalucía Francisco Carbonero, imputado hace unos días en una de las piezas de los ERE. Su inclusión generó tensiones internas en el proceso de relevo de CCOO que se reflejaron en el menor respaldo, del 61%, que recibió la nueva Ejecutiva.