El Gobierno formará a alumnos como «educadores» para que impartan clases de «diversidad sexual y género»

El Gobierno quiere «identificar» en las aulas a «jóvenes con interés, implicación y compromiso» para ser «referentes» de los alumnos y actuar de «educadores» en «salud sexual, sexualidad o diversidad sexual».

Así se recoge en la Guía de Escuelas Promotoras de Salud, promovida por el Ministerio de Educación, a la que ha tenido acceso OKDIARIO. El texto pretende convertir a la escuela en «un espacio participativo», donde «la comunidad y su entorno son fundamentales para el desarrollo del alumnado».

El plan se articula en varios ejes vinculados a la «promoción de la salud», como la alimentación, el deporte, el «bienestar emocional y la convivencia», la «prevención de adicciones» o la educación «afectiva-sexual».

En este último apartado, se promueve «favorecer la incorporación de contenidos de educación afectivo-sexual en las materias y tutorías» para lo que, según el departamento de Pilar Alegría, se hace necesario «crear un grupo de profesorado motivado».

Entre sus objetivos, se fijan «establecer una red de personas de referencia en temas de educación afectivo-sexual», «capacitando» a «jóvenes referentes» como «educadores/as entre iguales en salud sexual, sexualidad, derechos, género, diversidad sexual y de género y prevención del VIH y otras infecciones de transmisión sexual, prevención de acceso de menores a contenidos pornográficos, y prevención de embarazos no deseados».

Igualmente, entre otras actividades, se propone «analizar de manera crítica el entorno físico y social del centro educativo con enfoque de género, diversidad e inclusión», valorando distintos aspectos «como la cartelería de la escuela o el mobiliario». 

«Asamblea de bienestar»

En otro de los puntos, se plantea una «asamblea para el bienestar emocional y la convivencia» en el aula, concebida como un «espacio seguro para expresar los pensamientos, emociones y sentimientos, sin juicios de los demás».

Este plan, para incidir en el aspecto más «socio-afectivo» de la Educación, se produce mientras el Gobierno admite ya la necesidad de reforzar la enseñanza de las Matemáticas y la comprensión lectora en las aulas españolas.

El pasado fin de semana, Pedro Sánchez aprovechó un acto electoral en Galicia para poner el foco en estas materias, claves para el buen rendimiento escolar. Un refuerzo que llega después de que el informe PISA de la OCDE recogiese los peores resultados académicos de la historia en Matemáticas y Lectura entre los alumnos de 15 años.

En concreto, la competencia lectora cae 14 puntos (calificación de 485 puntos) y la competencia en Matemáticas baja 11 (se queda en 474 puntos) respecto al informe de 2012.

Entre otros factores, el informe señala a la «adicción» a los dispositivos móviles usados en el aula que puede «impactar en el aprendizaje de la clase». El 33% de los alumnos españoles admite que se distrae usando las pantallas en el aula, especialmente en las clases de Matemáticas.

«Matemáticas socioemocionales»

Ello, mientras el Gobierno promueve las Matemáticas con «sentido socioemocional» que permitan a los alumnos aprender a «gestionar» sus sentimientos y emociones ante esta asignatura y «fomentar el bienestar y el interés por esta disciplina».

Según el currículo educativo aprobado por Educación, «el rendimiento en Matemáticas puede mejorar si se cuestionan prejuicios y se desarrollan emociones positivas hacia las Matemáticas».

«El dominio de destrezas socioafectivas como identificar y manejar emociones, afrontar los desafíos, mantener la motivación y la perseverancia y desarrollar el autoconcepto, entre otras, permitirá al alumnado aumentar su bienestar general, construir resiliencia y prosperar como estudiante de Matemáticas», sostiene el Ejecutivo en el Real Decreto 217/2022, de 29 de marzo, por el que se establece la ordenación y las enseñanzas mínimas de la Educación Secundaria Obligatoria.

Todo ello se dirige, prosigue el currículo de la ESO para Matemáticas, «a la mejora del rendimiento del alumnado en Matemáticas, a la disminución de actitudes negativas hacia ellas, a la promoción de un aprendizaje activo y a la erradicación de ideas preconcebidas relacionadas con el género o el mito del talento innato indispensable».