Para secuenciar el virus

El Gobierno cede ante Madrid: hará PCR a los viajeros chinos que den positivo en la prueba de antígenos

Madrid Sanidad
Colas en el Aeropuerto de Barajas de Madrid. (Foto: Efe)
Pelayo Barro

El Ministerio de Sanidad, tras una tensa negociación, ha cedido a la propuesta de la Comunidad de Madrid sobre el protocolo de controles que se realizarán a partir de este sábado en barajas a todos los pasajeros proveniente de China. Madrid solicitó al departamento de Carolina Darias, en una reunión el viernes por la tarde, que no se conforme sólo con solicitar la pauta completa de vacunación o una PCR negativa en origen a los pasajeros provenientes de China, sino que también se realice un cribado con test de antígenos al pasaje y, en caso de que detecte un positivo, se le someta a una nueva prueba PCR. El objetivo de esta estrategia es obtener muestras del virus con el que llegan contagiados para secuenciarlo en un laboratorio y descubrir si se trata de una variante que pueda resultar potencialmente peligrosa.

Vuelta a febrero de 2020. Las autoridades sanitarias no saben a ciencia cierta a qué tipo de amenaza de Covid se enfrentan en la actual crisis sanitaria China. Puede ser una cepa Omicron la que ha causado los 250 millones de contagios en un sólo mes en el país asiático… o puede ser una variante nueva. No lo saben, básicamente, porque China apenas ha ofrecido información al respecto.

Por ello, el Gobierno madrileño trasladó este pasado viernes con urgencia al Ministerio de Sanidad una propuesta para que se realice un cribado en todos los vuelos procedentes de China y a todos los pasajeros. Sin excepción. Así se lo trasmitieron a Darias los consejeros de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, y de Cataluña, Manel Balcells, en un encuentro reservado que han mantenido después de la reunión oficial de la Ponencia de Alertas del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.

Según ha sabido OKDIARIO, la reunión entre Gobierno, Madrid y Cataluña se ha desarrollado en un ambiente de abierto desencuentro que recuerda a lo que ocurrido en 2020. En primer lugar, por la estupefacción que provocó en los representantes de ambas comunidades el hecho de que Sanidad, en un primer momento, no fuese capaz de concretar qué medidas pensaba tomar en aeropuertos para evitar la entrada de pasajeros contagiados de coronavirus procedentes de China, ni cuándo comenzará a tomarlas.

Poco después de esta inconcreción ante Madrid y Cataluña, se filtró la información de que la Dirección General de Salud Pública, a las órdenes de Darias, ya se había puesto en contacto con el servicio de Sanidad Exterior de los aeropuertos de Barajas y El Prat, y que el Ministerio del Interior también trabajaba en un protocolo propio para su personal en esas instalaciones. Detalles que no fueron trasladados ni a la Comunidad ni a la Generalitat en ese encuentro.

Secuenciación

Sin embargo, el gran choque entre Madrid y Sanidad ha venido dado por la solicitud madrileña de que se realicen test de antígenos a todo el pasaje que provenga de China. Tengan o no al día su cartilla de vacunación -si la tienen, Sanidad no realizará controles extra-.

La exigencia madrileña se basaba en un porqué muy concreto: las autoridades sanitarias de la Comunidad han fijado como prioridad conocer qué variante del virus proviene actualmente de China. Es necesario conocer si es una mutación ya conocida o, por el contrario, es un virus con un genoma diferente y características que puedan hacerlo más transmisible, o incluso resistente a las vacunas con las que se ha inoculado a la población española. Hecho este último que elevaría sustancialmente la alerta sobre esta crisis.

Existe el temor, como ocurrió ya en los primeros meses de 2020, a que China no esté notificando toda la información que conoce sobre ese explosivo brote que ha provocado 250 millones de casos en tan sólo un mes y que ha saturado los hospitales de todo el país.

Finalmente, Sanidad ha cedido ante la postura madrileña y aceptaba, a última hora de la tarde, comenzar a realizar un cribado con test de antígenos a todos los pasajeros llegados de China. Según ha sabido OKDIARIO, el lunes los técnicos de Sanidad Exterior en Barajas y El Prat también realizarán una PCR a aquellos pasajeros que den positivo, enviando la red de laboratorios de ambas comunidades autónomas la muestra obtenida para su secuenciación para determinar si hay alguna mutación no controlada en el país asiático.

Madrid ya había reclamado en la mañana del viernes un protocolo más exhaustivo que el anunciado por Sanidad, que permitía a los vacunados chinos -con una vacuna a la que la OMS da un 49% de efectividad- entrar sin mayor control a España. El protocolo pactado con Madrid y Barcelona es calcado al que ya aplican en los aeropuertos italianos desde el pasado miércoles.

Críticas

El viernes por la mañana, el consejero de Sanidad de la Comunidad de MadridEnrique Ruiz Escudero, ha sido rotundo a la hora de exponer los criterios bajo los cuales consideran que si bien «no estamos ante una situación de alarma, sí que tenemos que estar muy vigilantes a lo que está sucediendo con el Covid en China».

Así, ha pedido a la ministra Darias la convocatoria de un Consejo Interterritorial «con carácter urgente», así como «intensificar» los controles en el aeropuerto de Barajas. Ha criticado también que la ministra haya anunciado las medidas antes de reunir a la Comisión: «resulta sorprendente» ha dicho Escudero, que «primero haga los anuncios y después reúna al Consejo».

El consejero ha dicho que el gobierno regional considera insuficientes las medidas dispuestas por el gobierno ante el repunte de casos de covid en China. Las medidas anunciadas por Darias este viernes consisten en la realización de una prueba negativa de covid o un certificado de vacunación a todos los viajeros procedentes de China.

El gobierno regional considera insuficientes estas medidas, ha explicado Escudero, ya que es partidario de pedir en todos los casos la prueba covid negativa, es decir, a todos los viajeros, independientemente de que tengan certificado de vacunación puesto que «sabemos que la eficacia de la vacuna china es muy baja» y no está autorizada por la Agencia Europea del Medicamento.

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